Manos Unidas instauró en 1963 el Día del Ayuno Voluntario como la jornada en la que, de manera simbólica, los españoles podían mostrar su solidaridad con los millones de personas que ayunan a diario por obligación.
Desde entonces, el segundo viernes del mes de febrero, muchas personas se han sumado con un pequeño gesto, tan simbólico como cargado de sentido: un café menos, una comida menos, puede suponer ayudar a que otros puedan comer, estudiar o beber agua potable.
El Día del Ayuno Voluntario es una de esas ocasiones que demuestra que hacer algo desde aquí por los más desfavorecidos no es tan difícil; se trata de un pequeño gesto que constata que “no podemos ni debemos olvidarnos de todos los que pasan hambre todos los días, de todos los empobrecidos que se ven privados de muchos derechos”.
Con motivo de este día Manos Unidas, ONG para el desarrollo, de la Iglesia católica, sale a las plazas de España para dar lectura a un manifiesto de denuncia y compromiso.
En Ciudad Real, se realizará la lectura del manifiesto este sábado 12 de febrero, a las 18 horas, en la Plaza Mayor. Con esta actividad de denuncia se une a la Campaña 63 que arranca bajo el lema ‘Nuestra indiferencia os condena al olvido’.
