El PP considera que Pedro Sánchez se aferra al poder como una “garrapata” y que no convocará elecciones como se le está pidiendo desde la oposición porque ha pasado “de ser un muerto político a presidente del Gobierno” y no quiere perder ese estatus.
Así lo ha señalado este jueves el diputado nacional del PP José Alberto Martín-Toledano, en una rueda de prensa en la que ha destacado el “nerviosismo” que se nota en el Ejecutivo socialista por no saber dar respuesta a los problemas que hay en la sociedad y, a la vez, por no poder contentar a las exigencias de los partidos independentistas y Podemos que le ayudaron a llegar al Gobierno.
Unos nervios que se notaron este miércoles en la comparecencia del ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska, que, en su comparecencia en el Congreso no dio respuesta al cese del jefe de la UCO, o criticaba al PP, que era el grupo que le estaba preguntando por este y otros temas.
Para Martín-Toledano, el Gobierno no da respuesta a la datos que ya hablan de una desaceleración económica, a los problemas de la inmigración, donde ha pasado del “buenismo” de acoger a todos los que llegan a devolverlos en 24 horas, o las exigencias de Podemos para subir impuestos a las rentas más altas, lo que acaba en subida de impuestos para las clases medidas.
Para tapar todo esto, según Martín-Toledano, el Gobierno está utilizando como cortina de humo cosas que no preocupan a los ciudadanos, como la exhumación de los restos de Franco o la recuperación de la justicia universal, para, ha dicho, darle gusto al ex juez Baltasar Garzón, cuyos amigos están encabezando este asunto.
Control exhaustivo
Frente a este panorama, el PP, ha señalado Martín-Toledano, mantendrá un control “exhaustivo” del Ejecutivo, pidiendo comparecencias de los ministros en las Cortes para que expliquen sus políticas, pese a las cortapisas que se quieren poner como la de quitar atribuciones al Senado, donde, en la actualidad, el PP tiene mayoría absoluta.