Médicos y otros sanitarios de Ciudad Real han lanzado este martes una petición pública de “ayuda”, acompañada de exigencia de “medidas reales” a la administración, para frenar agresiones como la que sufrió hace unos días en Camarena (Toledo) un médico en una visita domiciliaria.
El doctor, de 60 años y natural de Mora, sigue en la UCI en estado crítico, y todos sus compañeros “compungidos” y asustados por lo ocurrido. “Se están viendo muchas agresiones. Esto hay que prevenirlo sin esperar a que ocurra algo grave”, ha explicado la médica anestesióloga Rosa Sarabia, delegada del Sindicato Médico de Castilla-La Mancha.
Sarabia y miembros de todos los sindicatos con representación en la sanidad pública han protagonizado una protesta poco concurrida en la capital, “porque estamos a tope de trabajo, hay muchísimo trabajo y no tenemos tiempo para nada”, ha justificado la doctora, aunque el apoyo a estas reivindicaciones es mayoritario.
Visitas con la Policía Local
Los sanitarios se plantean tener que hacer las visitas a domicilio nocturnas con protección policial y dicen que este tipo de intervenciones “suponen un peligro aterrador”. Pero también las Urgencias hospitalarias son un peligro, “viene de todo, gente en condiciones de agresividad, enfermos psiquiátricos, incluso en las unidades de cuidados intensivos y en los bloques de reanimación quirúrgica surgen conflictos”.
El mismo apoyo que a un agente de la ley
Desde el Sindicato Médico de Castilla-La Mancha, que ha convocado concentraciones en todos los centros de salud y hospitales de la región este martes, aseguran que son muchas más las agresiones que soportan que las que trascienden a la opinión pública y denuncian abandono de los gobiernos. La profesional ha llegado a comparar la situación que se produce cuando resulta herido o fallece un guardia civil en acto de servicio, “con presencia hasta del presidente del Gobierno”, mientras que “los sanitarios estamos solos”.
Plan de Prevención de Riesgos
Entre las medidas que proponen destaca la activación del Plan de Prevención de Riesgos Laborales frente a las agresiones, con sus protocolos, dotado económicamente para implementar los recursos materiales y humanos para garantizar la integridad física del personal.
También la “convocatoria urgente” del comité sectorial de salud laboral del Sescam, así como del Observatorio frente a las agresiones para adoptar medidas que impulsen planes de formación e información dirigidos a los profesionales.
“Los médicos estamos vendidos, sobre el papel hay mucho pero en la práctica no hay nada, lo que queremos es que se nos tome en serio, cualquiera es susceptible de sufrir una agresión. Lo de Camarena no puede volver a ocurrir y es una pena que tengan que pasar cosas así para que se tomen medidas”, ha rematado la doctora Sarabia.