Este 15 de marzo se cumplen cinco años del inicio de uno de los periodos más críticos que ha tocado vivir a la sociedad en los últimos años, el confinamiento domiciliario por la pandemia de Covid-19. Con este motivo el próximo miércoles día 12 de marzo a las 20 horas, el Antiguo Casino de Ciudad Real acogerá el concierto ‘Música para la Esperanza’, en la que Irene Sánchez (flauta) y Alfredo Sánchez (guitarra), padre e hija, tocarán una selección de las 50 piezas musicales breves que realizaron diariamente durante estos días de encierro, colgaban en Youtube y mandaban a sus contactos.
Un concierto que nace, según ha explicado Alfredo Sánchez, para recordar la enseñanza que supuso el confinamiento: «la revitalización del ánimo de seguir resistiendo, viviendo y queriendo seguir formando parte parte de la vida cotidiana». Ha añadido que en aquella ocasión se perdió la normalidad de la vida y que se pudo salir de ello con ánimo renovado, que es lo que precisamente celebra ‘Música para la Esperanza’.
Estas grabaciones con fragmentos musicales de cómo máximo dos minutos que compartían con sus contactos y a su vez estos con los suyos, ayudaron, según Alfredo Sánchez, a mantener viva «la lucecita al final del túnel de muchas agonías» y provocó «un momento de solidaridad».
Alfredo Sánchez ha destacado cómo mucha de aquella gente a las que enviaban sus ejecuciones le han comentado, a raíz de contactar con ellas para hablarles del concierto, cómo les sirvió de coraje y estimulo para resistir la situación que se estaban viviendo.
Un amplio repertorio musical
Se trata de un repertorio muy amplio en el que estos músicos no se dejan fuera ningún género musical ya que no querían «excluir ninguno que pudiera ser reconocido por la gran variedad de destinarios a donde llegaba». Desde los compositores más importantes de la música clásica, pasando por banda sonoras de películas, géneros como la zarzuela o éxitos del pop.
Para el concierto del Antiguo Casino han hecho una selección de 38 de las cincuenta piezas divididas en doce bloques. «No podíamos tocar las cincuenta ya que la duración rondaría los cien minutos», ha explicado Alfredo Sánchez. Una selección que tienen a evocar la alegría, el amor, la complicidad, el desenfado y el compromiso en un concierto que sugiere la emoción de la música, unida a la de saber que, también de esas situaciones tan terribles, «somos capaces de salir con la fuerza de gigante que llevamos dentro».
Como curiosidad, ha comentado que el concierto finalizará con la misma pieza con la que concluyeron sus grabaciones aquel 3 de mayo de 2020, fecha en la que comenzó la desescalada, el intermedio de la zarzuela ‘La Boda de Luis Alonso’, porque es una pieza rítmica, alegre y poderosa.
