Para ser médico en la Gerencia de Urgencias, Emergencias y Transporte Sanitario, además de formación, se requiere, ante todo, seguridad en ti mismo, ser capaz de trabajar en equipo, capacidad de adaptación al medio y tener en muchas ocasiones nervios de acero, para que no te supere el estrés, en situaciones críticas.

Hay que valer, pero “esto engancha mucho”, por la adrenalina, porque son muy diferentes las situaciones que te puedes encontrar en cada guardia -desde un parto o una parada cardiorespiratoria hasta un incendio o un accidente- y porque “te das cuenta que eres muy útil y de forma muy inmediata”, destacó Juan Valenciano, director médico de la Gerencia de Urgencias, Emergencias y Transporte Sanitario, que este lunes desplegó en la Facultad de Medicina una exhibición de significativos medios con los que trabaja en situaciones graves y críticas: un helicóptero, una UVI móvil y un hospital de campaña.

Cuarenta y seis estudiantes de Medicina se apuntaron de forma voluntaria a esta jornada en la que se explicaron en qué situaciones es más útil utilizar un helicóptero o una ambulancia para atender a un paciente crítico y en aquellas en las que se instala un puesto médico avanzado cuando hay que atender al mismo tiempo a varias personas como en un accidente de tráfico o un incendio.

Tras esta muestra de medios, se recrearon tres situaciones tipo en las que trabajan a diario como atender una parada cardiorespiratoria en un adulto con las maniobras de soporte vital avanzado, la elaboración de una clasificación o triaje de los heridos en los incidentes con múltiples víctimas y cómo se atiende a un paciente politraumatizado al que, primero, hay que hacer una buena inmovilización para poder movilizarle correctamente y no agravar las lesiones que pueda tener.

Se trata de la segunda vez, tras la del año pasado, que la Facultad de Medicina acoge esta jornada práctica que posibilita conocer mejor esta opción de trabajo a unos estudiantes que “conocen ya muy bien el hospital y sus especialidades”, quedándose esta gerencia “un poco fuera del rango de lo que suelen visitar y estudiar”, comentó la decana de la Facultad, Inmaculada Ballesteros.

“Quizás somos esos grandes desconocidos para la población en general y, en concreto, para los estudiantes de Medicina”, apreció Valenciano, encantado con esta propuesta explicativa de la labor que realizan para darle visibilidad y, al mismo tiempo, crear “cantera” de nuevos profesionales en una gerencia que, por otra parte, lleva muchos años luchando en favor de que se reconozca la especialidad de Urgencias, Emergencias y Transporte Sanitario, cuyo campo de actuación es amplísimo, mayor que cualquier otra especialidad, y en un medio que no es el propiamente sanitario como un hospital sino que va de los domicilios de los pacientes a intervenciones, por ejemplo, en carreteras, montes, piscinas o ríos.

Respecto a la cualidad de saber trabajar en equipo, que en el caso de esta gerencia suele ser de tres o cuatro personas, destacó la importancia de tener muy claro el papel de cada uno de los miembros, apoyándose los unos a los otros, e indicó que la coordinación también tiene que ser con otros profesionales como los bomberos y las fuerzas y cuerpos de Seguridad del Estado, así como en la transmisión de la responsabilidad del cuidado de los pacientes cuando los entregan a los hospitales.
