La sección primera de la Audiencia Provincial de Ciudad Real juzgará el martes que viene otro caso grave de abusos sexuales de menores. El imputado es un vecino de Luciana F.M.P.P., de 39 años ahora, acusado de haber abusado de una menor discapacitada con la que entabló amistad en el verano de 2015.
La fiscalía considera probado que el adulto y la niña, de 14 años cuando supuestamente ocurrieron los hechos, iniciaron una amistad que fue subiendo de tono hasta llegar al contenido sexual.
“El próximo ‘finde’ te toco mejor”
La víctima no es del pueblo, el acusado aprovechaba las pocas veces que se vieron a solas para manosearla (se considera probado que en una ocasión le introdujo varios dedos en la vagina sin emplear violencia o intimidación). Además se considera acreditado que le envió videos pornográficos y mensajes sexuales a su teléfono móvil del tipo “a ver si el próximo finde nos metemos en algún sitio y te toco mejor”.
El día 27 de octubre de 2015, según recoge el escrito de calificación provisional del caso, el investigado se presentó de forma voluntaria ante la Guardia Civil de Piedrabuena ante quien reconoció parcialmente los hechos, antes de que la menor denunciara en la ciudad en la que residía.
Por lo ocurrido F.M.P.P. se enfrenta a 13 años de prisión acusado de un delito de abuso sexual sobre menor de 16 años y otro de provocación sexual. En concepto de responsabilidad civil debe abonar 300 euros por la sanidad de las lesiones genitales que sufrió la niña y 12.000 por daños morales.
La víctima tiene reconocida una minusvalía psíquica de un 36%. Desde octubre de 2015 está en vigor una orden de alejamiento del adulto respecto de la presunta víctima.