Ramón Alén (Orense, 77 años) cumple esta semana cincuenta años ejerciendo la abogacía sin ganas de colgar la toga. Las bodas de oro con una profesión vocacional vivida “muy intensamente”, dice, las ha celebrado haciendo lo que mejor se le da: defendiendo a un acusado de lesiones en la Audiencia Provincial de Ciudad Real, en un juicio resuelto con una sentencia de conformidad, acorde a su carácter “conciliador y pactista”, de abogado de maneras de la vieja escuela.
“Mientras pueda voy a seguir en activo”, cuenta. Puede y por el momento no se le pasa por la cabeza jubilarse. Con dos hijos juristas -una trabaja en Recursos Humanos en la Comunidad de Madrid, el otro en el equipo del ministro Félix Bolaños-, el despacho se lo dejará a su segunda mujer, también abogada, con la que se casó hace tres años.
Gallego de Ciudad Real, la capital en la que ha desarrollado la mayor parte de su actividad profesional, Alén fue muy conocido en los primeros años de la Transición y hasta los noventa por su militancia en la mítica Unión de Centro Democrático (UCD) de Adolfo Suárez, rebautizada como Unión de Centro Democrático y Social. “Creo que soy el referente del centrismo en la provincia”, explica en esta entrevista para Lanza.
Político del centrismo y la UCD en Ciudad Real
Estuvo en todas las listas, municipales, europeas…como figura destacada de la UCD que tuvo dos concejales en el Ayuntamiento de Ciudad Real, Vicente Gallego (luego en el PP) y Manuel Muñoz. Veinte años en política sin ejercer ningún cargo, aunque lo intentó, hasta que Mario Conde fichó por el partido y se dio de baja.
Alén fue presidente del Comité Nacional de Conflictos, miembro de la ejecutiva de UCD, y presidente provincial y autonómico del CDS. En una entrevista con este periódico en la muerta de Adolfo Suárez recordaba que compartió muchas horas con Suárez y le acompañó en bastantes actos mientras existieron ambos partidos “tanto en los momentos de gloria y de poder, como en otros de zozobra”.
Compañero de estudios de Conde-Púmpido
Licenciado en Derecho por la Universidad de Santiago de Compostela, compartió estudios con el actual presidente del Tribunal Constitucional Cándido Conde-Pumpido, “éramos amigos íntimos y compañeros de clandestinidad”, recuerda. Empezó a ejercer en 1975 y unos años después aterrizó en Ciudad Real como asesor jurídico de Mapfre, la provincia de la que no se ha movido en la profesional.
Es posible que haya pocos abogados que tenga la resistencia y versatilidad de Alén, que ha llegado a llevar “catorce juicios en un día en juzgados de Alcázar de San Juan, Ciudad Real y Puertollano”.