La imagen, portada a varal a un hombro y vestida con manto rojo de brocado, a la que precedía la Cruz Guía, y tras cuyas andas ocupaba la presidencia religiosa don Adriano Delgado Perea, párroco de la de Santa María del Prado (La Merced), marcaba la ruta a seguir a más de un centenar de personas que acompañaron a la Virgen en su caminar. Tras abandonar la plaza de Santiago la comitiva recorrió una buena parte del barrio por las calles Norte, Estrella, Calatrava, Paseo del Cristo de la Caridad, Inmaculada Concepción, Lirio, Progreso, Refugio y retorno a la iglesia parroquial.
El rezo de los correspondientes “misterios”, con meditaciones principalmente basadas sobre textos de San Juan de Ávila y Santa Teresa de Jesús corrió a cargo de don Adriano, el primero, diferentes hermanos y hermanas, así como de religiosas de algunas de las comunidades que se encuentran en la demarcación geográfica del barrio.
Durante el recorrido se interpretaron cantos marianos como “Reina del Cielo”, “Virgen Dolorosa”, “Madre de los creyentes”, “Madre de los pobres”, “Estrella y camino”, “Dolorosa”,… al ritmo de un coro dirigido por Pilar Notario Ruiz, miembro de la delegación diocesana de Liturgia.