Un pasajero del tren AVE Barcelona-Sevilla ha pasado esta noche en los calabozos de la Policía Nacional en Ciudad Real por presuntos delitos de resistencia, desobediencia y atentado a la autoridad. La policía lo «sacó» literalmente del tren en el poco antes se negó a dejar de fumar y hacer uso de la mascarilla –obligatoria en el transporte público- a instancias del supervisor.
Todo comenzó por una llamada al 091 del supervisor del pasaje de este tren cerca de Ciudad Real, estación elegida para la intervención con el viajero que la estaba ‘liando’ en el interior del convoy. Policías nacionales, auxiliados por vigilantes de seguridad de la estación, acudieron a la estación, sobre las ocho de la tarde de ayer miércoles, y le pidieron la documentación al pasajero rebelde, un veinteañero, que se negó a identificarse y a apearse del tren, según fuentes la comisaría de la Policía Nacional.
Lesionó a un policía en un dedo
Ante su actitud, policías y vigilantes de seguridad, forcejaron con él para sacarlo del tren y un policía ha terminado lesionado en un dedo. El pasajero díscolo, que iba de Barcelona a Sevilla, terminó su viaje en Ciudad Real, detenido por desobediencia y atentado. Este jueves está previsto que pase a disposición judicial.
