A.M.R., un viudo de Fuente el Fresno sin antecedentes, acusado de haber abusado de una mujer con discapacidad de esa localidad, negó este miércoles en el juicio haber tenido cualquier tipo de contacto con ella.
Alegó que tiene problemas para mantener relaciones sexuales, y es imposible que se acostara con la víctima, tal y como sostienen fiscalía y acusación particular, que reclaman ocho años de cárcel para él.
La mujer, con una discapacidad mental del 66%, se ha reafirmado en lo que ya relató a lo largo del proceso. Que en el verano del año 2014 el hombre la abordó por la calle y la llevó a una casa propiedad de un familiar en la que no vive nadie, en la que se acostó con ella.
“No utilizó la violencia, pero se aprovechó de una mujer especialmente vulnerable y por tanto cometió un delito de abuso sexual de los más graves”, explica el abogado Gregorio Rodríguez, que ejerce la acusación particular en representación de la familia.
Para esta parte no hay dudas de que la mujer dice la verdad, “incluso ha dado detalles de la casa en la que pasó todo que sólo puede conocer porque estuvo allí”, ha señalado Rodríguez tras la vista, a puerta cerrada en la Sección Segunda de la Audiencia.
El equipo psicosocial también considera creible el testimonio de la perjudicada, que fue contándoles a sus padres -tienen su tutela legal, está incapacitada- lo que supuestamente le había hecho A.M.R.
La defensa por su parte reclama la libre absolución porque considera que no hay pruebas de cargo.
Las acusaciones también solicitan una orden de alejamiento de nueve años en los que el acusado, de ser condenado, no deberá aproximarse a menos de doscientos metros de la mujer, y una indemnización de 18.000 euros por los daños morales.A.M.R., un viudo de Fuente el Fresno sin antecedentes, acusado de haber abusado de una mujer con discapacidad de esa localidad negó este miércoles en el juicio haber tenido cualquier tipo de contacto con ella.
Alegó que tiene problemas para mantener relaciones sexuales, y es imposible que se acostara con la víctima, tal y como sostienen fiscalía y acusación particular, que reclaman ocho años de cárcel para él.
La mujer, con una discapacidad mental del 66%, se ha reafirmado en lo que ya relató a lo largo del proceso. Que en el verano del año 2014 el hombre la abordó por la calle y la llevó a una casa propiedad de un familiar en la que no vive nadie, en la que se acostó con ella.
“No utilizó la violencia, pero se aprovechó de una mujer especialmente vulnerable y por tanto cometió un delito de abuso sexual de los más graves”, explica el abogado Gregorio Rodríguez, que ejerce la acusación particular en representación de la familia.
Para esta parte no hay dudas de que la mujer dice la verdad, “incluso ha dado detalles de la casa en la que pasó todo que sólo puede conocer porque estuvo allí”, ha señalado Rodríguez tras la vista, a puerta cerrada en la Sección Segunda de la Audiencia.
El equipo psicosocial también considera creible el testimonio de la perjudicada, que fue contándoles a sus padres -tienen su tutela legal, está incapacitada- lo que supuestamente le había hecho A.M.R.
La defensa por su parte reclama la libre absolución porque considera que no hay pruebas de cargo.
Las acusaciones solicitan además una orden de alejamiento de nueve años en los que el acusado, de ser condenado, no deberá aproximarse a menos de doscientos metros de la mujer, y una indemnización de 18.000 euros por los daños morales.
