Skydweller Aero, la primera empresa en instalarse en el aeropuerto de Ciudad Real, construirá aeronaves no tripuladas propulsadas por energía solar enfocadas al sector de las telecomunicaciones, geoespacial, meteorológico, así como de operaciones de emergencia y militar.
En un comunicado emitido por la propia empresa que se instalará en Ciudad Real, tal y como se anunció el pasado mes de febrero, la entidad explica que aprovecharán la energía solar y aérea desarrollada por el proyecto suizo ‘Solar Impulse’, el primer avión solar del mundo, para el desarrollo de aviones no tripulados a gran escala.
El objetivo, según señalan desde la empresa, es crear un avión “que vuele siempre”, ya que si la aeronave se nutre de la energía solar no hará falta que baje hasta tierra para repostar.
Esta nueva tecnología, apuntan desde la empresa, permitirá “conseguir un mundo más conectado”, ya que ésta servirá para ofrecer diferentes servicios desde el ámbito de las telecomunicaciones.
El CEO de Skydweller, Robert Miller, señala en este comunicado que en septiembre comenzarán a desarrollar, testar e industrializar esta nueva tecnología, capaz de realizar viajes ilimitados al estar alimentados por energía solar, al igual que la tecnología de los satélites en los años 90.
Miller apunta que Castilla-La Mancha y Ciudad Real aportan a Skydweller un lugar idílico a la hora de desarrollar este trabajo. Así mismo, se congratula por la buena acogida y el entusiasmo con el que las autoridades locales han recibido el proyecto, quienes creen que será una oportunidad económica para el desarrollo de la provincia y la región.
40 millones para este proyecto
El pasado mes de febrero, cuando Skydweller formalizó su acuerdo con Ciudad Real International Airport (CRIA) para instalarse en el aeropuerto de Ciudad Real e iniciar un proyecto de fabricación de este tipo de aeronaves, los responsables de la empresa anunciaron que la empresa, en los cinco primeros años, invertiría un total de 40 millones. De ellos, cinco millones serían para los primeros seis meses, con la previsión de crear inicialmente cuarenta empleos que podrían superar el centenar en los próximos años.
Skydweller destacó que durante sus primeros 18 meses en el aeropuerto ciudarrealeño afrontará el desarrollo y la tarea de investigación del proyecto para, “dentro de 18-20 meses”, iniciar la fase de producción en serie de aeronaves con componentes de alta tecnología.