Tomás M.C.E., consumidor de heroína y cocaína desde los noventa, ha pedido perdón al “amigo de la infancia”-dice- al que hace un año rajó en el cuello con el cristal de una litrona en los jardines de la plaza de toros de Ciudad Real. “Yo no quería hacerle daño. Siento mucho lo que pasó y estoy arrepentido”, ha declarado hoy en el juicio por intento de homicidio ante la Audiencia Provincial.
La víctima, Ramón R.H., otro habitual de esos jardiones, sufrió un grave corte en la región submandibular del que se ha recuperado, pero le ha quedado una cicatriz. La herida también le afectó al nervio facial y ha perdido algo de movilidad.
Ninguno de los dos han aclarado por qué se produjo la pelea, que grabó una vecina sobre las 23.45 horas del 5 de septiembre de 2016. El acusado porque según dice no se acuerda de nada: iba drogado y bebido. La víctima, con un problema muy severo de tartamudez -ha tenido que testificar con la ayuda de su madre como intérprete-, ha ratificado que Tomás le amenazó esa noche con matarlo, le agredió y le cortó con una botella.
Una vecina lo grabó con su teléfono
En el momento del altercado había familias con niños en esa plaza, y una vecina grabó la agresión con su teléfono móvil. El video se ha visionado como prueba en el juicio con las explicaciones de su autora, que según ha declarado escuchó a Tomás decirle a la víctima; “te juro por mi madre que esta noche te tengo que matar”, y darle manotazos “al muchacho”, hasta que en un determinado momento de la grabación Tomás agarró el cuello de la tercera botella de cerveza que se les caía y le asestó un golpe al otro.
Esta testigo estaba grabando, en compañía de otras personas, para enviarle el video a su marido (al parecer se divertían con los conflictos de los adictos que se reúnen allí). Esa tarde el motivo de su atención eran las botellas de cerveza que se les caían al suelo.
“Si me pasa algo ha sido Tomás”
La mujer ha testificado a cara descubierta y antes de marcharse le ha pedido protección a la sala: “Si me pasa algo me lo ha hecho Tomás”, ha dicho. La presidenta del tribunal la ha conminado a denunciar si está siendo víctima de amenazas.
Homicidio o lesiones graves
La fiscalía pide por esto 8 años de cárcel para Tomás M.C.E. (en prisión preventiva desde el 7 de septiembre del año pasado), porque lo considera autor de un delito de intento de homicidio. Para Donaciano Muñoz, el abogado de Tomás, la calificación es excesiva, “aquí no se ha visto intención de matar por ningún lado”. Esta parte reclama una condena mínima por un delito de lesiones, con la atenuante de drogadicción, de no más de un año de prisión.
La fiscalía, que dispone de varios informes de la adicción a las drogas del acusado, considera que en el caso no ha quedado acreditado que aquella noche estuviera tan afectado por el consumo que no supiera distinguir lo que hacía.