En una España ‘abonada’ al podio en las grandes citas internacionales, Miguel Sánchez-Migallón puede decir que forma parte de ese grupo que continúa año tras año entre los mejores del planeta. El jugador ciudarrealeño se colgó este pasado domingo la medalla de bronce en el Campeonato del Mundo de Polonia y Suecia 2023, en su tercera gran participación con los ‘Hispanos’. Fue para él su tercer metal, después del también bronce en los Juegos Olímpicos de Tokio y la plata del pasado Europeo 2022. Un pleno de tres de tres suma Sánchez-Migallón con la selección española. Y, en este competitivo equipo nacional, aspira todavía a más.
“Sí que es mi tercer campeonato con España y mi tercera medalla. Parece que es fácil, pero el trabajo que lleva detrás es muy duro. Para mí ha sido un mes lleno de emociones, con mucho trabajo y estoy muy contento de poder compartir esta alegría con un gran grupo”, cuenta el ciudarrealeño con ese bronce ya en su poder.
Para el jugador del Kielce polaco, extremo y especialista defensivo, gran parte de este éxito, uno más de la selección española de balonmano, en este campeonato ha radicado “en la capacidad que hemos tenido para adaptarnos a las situaciones y encontrar soluciones en situaciones adversas. Hemos remontado partidos que muchos otros equipos habrían tirado la toalla”.
Eso, por ejemplo, hicieron los ‘Hispanos’ en el emocionante encuentro de cuartos de final ante Noruega, un duelo que tenían prácticamente perdido pero que, a base de fe y pelea hasta el final, lograron empatar en el último segundo por medio de Dani Dujshebaev para llevarlo a la prórroga. En ella, con dos prórrogas, lograrían el pase a semifinales con un triunfo por 35-34. “Fue muy intenso, ellos llevaron la iniciativa durante todo el partido, pero este equipo nunca deja de creer y, a fuerza de luchar, empatamos de forma increíble. Y después de dos prórrogas conseguimos ganar. Tuvo mucho mérito. Creo que será un partido que va a quedar para la historia”, relata.
En este Campeonato del Mundo, España superó en la primera fase a Montenegro (30-25), Chile (34-26) e Irán (35-22), para meterse primera en la Maind Round. En ella, ganó a Polonia (27-23) y Eslovenia (31-26), para caer con Francia por 26-28 y pasar como segunda a los cuartos de final. En esa ronda ganó de esa espectacular forma a Noruega y, ya en semifinales, no pudo con la poderosa Dinamarca (23-26), que se convertiría después en la campeona del mundo tras imponerse a Francia. En el duelo por el bronce, tocó la anfitriona Suecia en el Tele2 Arena de Estocolmo, a la que los ‘Hispanos’ superaron por 39-36 en un partido que caían por 22-18 al descanso.
“Fue todo muy emocionante. Empezamos el partido bastante mal, ellos nos hicieron mucho daño con su saque rápido y contraataque. Nos plantearon un partido diferente al que habíamos estado jugando el resto del campeonato, pero en la segunda parte, a partir de la defensa 5-1, supimos darle la vuelta. Esos momentos en los que vas remontando delante de 20.000 suecos son increíbles”, explica finalmente un Miguel Sánchez-Migallón que, con España, se llevó la victoria frente a los suecos y el bronce en todo un Mundial. Su tercero en su tercera gran competición. Y espera que siga la racha.
