El matrimonio de Ciudad Real formado por J.T.C. y T.G.A., de 34 y 33 años, respectivamente, han reconocido haberse dedicado al trapicheo de drogas en Ciudad Real en el año 2017, cuando los detuvo la policía, para costearse su propia adicción.
La fiscalía ha reconocido sus graves problemas de adicción a las drogas y ha decidido rebajar de cuatro años y medio a dos la solicitud de condena, por lo que el caso se ha cerrado con una sentencia de conformidad esta mañana ante la sección segunda de la Audiencia Provincial.
Suspensión de la ejecución de la pena
“La cantidad de droga es mínima para dos personas consumidoras”, dice su abogada Alicia Correal, que pedirá la suspensión de la ejecución de la pena para evitar que ingresen en prisión.
Además deben pagar una multa de unos 800 euros con responsabilidad personal en caso de impago.
La policía sospechó por el trasiego de adictos
Los acusados, que viven en un barrio próximo a la comisaría de la Policía Nacional en Ciudad Real, levantaron las sospechas de la Brigada de Policía Judicial por el constante trasiego de adictos a las drogas en su casa.
Tras varios seguimientos y comprobaciones el 28 de noviembre de 2017 se autorizó la entrada y registro en el domicilio. La policía encontró recortes y envoltorios de plástico con unos diez gramos de cocaína y cinco de heroína, además de una báscula de precisión. Todo oculto en un calcetín que la mujer arrojó por una ventana cuando empezó el registro.
El acuerdo ha evitado la celebración del juicio previsto para este martes.