La mitología griega cuenta que el dios del vino, Dionisos, lanzó su corona a las estrellas para conquistar el corazón de Ariadna, hija del rey de Creta. Desde entonces, Ariadna pasó a ser inmortal, y la Corona Boreal ilumina la Tierra cada verano desde el firmamento dispuesta a estimular la imaginación de los amantes de la astronomía y las historias.
Asociaciones de astronomía y aficionados en general tomarán la próxima semana los puntos más altos de la provincia para disfrutar de la lluvia de estrellas más famosa del año, las Perseidas. También es un buen momento para conocer la creación de las constelaciones por Zeus, como Dios del cielo, y para contemplar Júpiter y Saturno.
La lluvia de estrellas empezó el 17 de julio y durará hasta el 24 de agosto. El momento álgido será el próximo lunes 12 de agosto, a partir de las 4 de la madrugada, cuando habrá alrededor de 100 meteoros a la hora. Algunas de las estrellas sorprenden por su intensidad y coloración llamativa, la velocidad puede superar los 50 kilómetros por segundo y la tasa de actividad los 200 meteoros la hora.
Casi todas las lluvias están asociadas a cometas y toman el nombre de la constelación de la que parecen venir. Así, las Perseidas toman el nombre de Perseo, porque su “radiante” o “punto de origen” está en esta constelación. Según la mitología griega, Perseo fue un semidiós hijo de Zeus y la mortal Dánae.
Alternativas de ocio en la noche manchega
Licenciada en Ciencias Ambientales y monitora astronómica con certificación Starlight, Mónica Fernández está al frente de la única empresa dedicada al turismo astronómico en exclusiva de toda la provincia. Su propuesta de “astronomía y mitología a cielo abierto” es una de las propuestas más interesantes para conocer las estrellas.
Al frente de la empresa de ecoturismo Las 7 Cabrillas, Mónica Fernández recomienda acudir al Parque Nacional de Cabañeros y al Parque Natural del Valle de Alcudia y Sierra Madrona para ver las estrellas. Desde Alcoba de los Montes, aconseja “ir a zonas alejadas de las grandes ciudades y sin industrias”.
Para contemplar estrellas fugaces solo hace falta ir a sitios alejados de la contaminación lumínica, llevar abrigo y algo cómodo para sentarse, y mirar a la zona contraria de la Luna. Mónica Fernández señala que este año la Luna llena del 15 de agosto dificultará la visibilidad. Los telescopios no son necesarios y, según destaca Mónica, “tampoco para profundizar en galaxias, nebulosas y cúmulos”.
Otras lluvias de estrellas
Las Lágrimas de San Lorenzo no son las únicas estrellas fugaces que surcan en estas fechas la bóveda celeste. El Instituto Geográfico Nacional indica que las Acuáridas estarán presentes hasta el 23 de agosto. Pasado el verano, habrá que esperar hasta octubre para la próxima lluvia de meteoros, con las Dracónidas.
Desde el Complejo Astronómico La Hita de Toledo explican que las Perseidas surgen cuando la Tierra atraviesa las partículas de polvo que deja el cometa 109P/Swift-Tuttle a lo largo de su órbita. “Las partículas de polvo entran en contacto con la atmosfera terrestre y se desintegran a gran velocidad, generando las esperadas estrellas fugaces o meteoros”, señalan.
Formado por hielo y rocas, las características colas de polvo y gas de los cometas surgen al aproximarse al Sol. En el observatorio de La Puebla de Almoradiel indican que este cometa en cuestión tiene “un periodo orbital de 133 años y la última vez que se aproximó al Sol fue en 1992”.