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El líder, Quintanar del Rey, recibía este domingo la visita del Valdepeñas que llegaba tras empatar cuatro de los últimos cinco partidos, con el mismo déficit de gol que les ha venido persiguiendo desde el principio de la temporada.
Un partido exigente que los de Juan Arsenal han preparado sabiendo que conseguir sacar puntos pasaba por mantenerse sólidos en defensa, aprovechando las opciones que fuesen encontrando en ataque.
Con cuatro equipos en la parte baja de la tabla igualados a 10 puntos, sacar algo es primordial cada vez que pita el árbitro, de ahí que Valdepeñas siga aferrándose a su seguridad defensiva para crecer como equipo jornada tras jornada.
A punto estuvo de irse al traste lo diseñado en el minuto 15, cuando Quintanar dispuso de un penalti, que Monroy falló, o mejor dicho, el meta valdepeñero adivinó, quedándose con el balón en sus guantes.
En este momento, se crecieron los vinateros, yéndose a buscar el campo rival, en una insistencia que se fue agotando a medida que iban transcurriendo los minutos hacia el descanso.
Con el partido igualado regresaron los dos conjuntos al verde, enfrentándose a un partido resumido en 45 minutos.
Pese a que los primeros compases de la segunda mitad mantuvo a los dos equipos replegados, esperandonos ver la propuesta rival, a medida que pasaron los minutos, el choque se hizo más vertical, con un intercambio de ataques que exponía a las zagas a sufrir un golpetazo, si se cometía algún error en la zona caliente.
Hubo ocasiones y a la cita futbolera sólo faltó el gol. Estuvo entretenida la recta final, donde pudo pasar cualquier cosa, siendo los corazones de los dos porteros los que más sufrieron en esa huelga de pizarras.
Así, el Valdepeñas consigue un nuevo empate contra un gran rival como Quintanar, y de paso sirve para que la clasificación se ajuste todavía más en la parte alta y media de la tabla.
