El portavoz del Grupo Municipal de Vox, Luis Alberto Marín, lamentó la propuesta del PSOE en el pasado pleno municipal, “a modo de chantaje o no sé de qué”, de apoyo a los presupuestos municipales si se mantenía el nombre de la Unidad Policial sobre Violencia de Género, cuando tan sólo ha habido un cambio de nomenclatura, de Viogén a Atenea, y no se ha producido, “en ningún momento, cambios de funcionamiento, no hay menos dotación, no se ha reducido el presupuesto ni mucho menos ha bajado la preocupación por esta lacra que vivimos”.
“Fue la propia concejal de Igualdad, María José Escobedo, quien explicó lo que supone este cambio de nombre, un simple hecho nominativo, nada más”, aseveró Marín, que criticó que, “desde el PSOE, no hacen sino agitar un pensamiento que han hecho suyo, el feminismo y la lucha contra la violencia machista”.
En su opinión, la conclusión para el ciudadano de la propuesta del Grupo Socialista “no puede ser otra que a la oposición no le interesa lo más mínimo el destino de las cuentas del Ayuntamiento, sólo le interesa seguir con la manipulación ideológica del tema de la violencia de género”.
“Desde Vox, el término violencia lo ampliamos a la violencia de cualquier tipo”, agregó el edil, que denostó que, durante el debate de las varias mociones en relación con esta Unidad Policial, la portavoz del PSOE les calificara en reiteradas ocasiones de “machistas, franquistas y negacionistas”.
“Pues no, por más alto que lo diga y más veces que lo repita no lo va a convertir en verdad. No somos machistas ni lo hemos sido nunca, la violencia contra las mujeres es una aberración, el hombre que atenta de forma física, verbal o psicológica contra una mujer deja de ser un hombre”, subrayó.
En cuanto a lo de franquistas, recordó que, salvo él, el resto de ediles de Vox no habían nacido en esa etapa y “yo sí me acuerdo cuando murió Franco, tenía nueve años, no fui a clase y me fui a jugar con mis amigos. Eso es todo. Pero, bueno, debe ser que les da rédito político”.
Así mismo, negó que “Ciudad Real sea una ciudad racista”, en relación con la moción defendida por el PSOE encabezada con el título ‘Por una ciudad libre de racismo’. A juicio de Marín, éste sería “un título adecuado para aquellas ciudades tachadas de racistas si es que las hay. Pero, ¿precisamente para Ciudad Real?”, se preguntó.
“Para presentar una moción, sobre todo para sostener tal afirmación, el Grupo Municipal Socialista debía citar casos concretos para hacernos una idea de si Ciudad Real es o no racista”, dijo Marín, que consideró “absurdo buscar una declaración de ciudad no racista para una ciudad que no lo es”. A este respecto, expuso que el también concejal de Vox, Ricardo Chamorro, enlazó esta moción con “la denuncia que venimos manteniendo” con el tema del aeropuerto. “Desde el minuto cero, hemos dicho que no debe hacerse un macrocentro pero, ya no sólo por el hacinamiento de inmigrantes irregulares, sino por el estado de alarma que eso podría crear”.
“Se mencionaron datos y cifras de delincuencia asociada a la inmigración irregular y nos encontramos con una oposición cuya única respuesta era la sonrisita”, apuntó Marín, que recordó que el PSOE relató “cómo nuestros antepasados emigraron por miles buscando una mejor vida. Sí, pero no mencionan que lo hicieron con ciertas garantías de regularidad, con un contrato bajo el brazo en algunos casos e incluso con certificado de penales”.
“Volvemos a repetir por activa y por pasiva: no estamos en contra de la inmigración legal, regulada y con papeles, pero no podemos cruzarnos de brazos ante la llegada masiva de personas de forma indiscriminada. Claro que buscan una vida mejor, pero, ¿aquí se la podemos dar, estamos capacitados?, cuestionó Marín, que subrayó que “no somos una ciudad racista”.
Disculpas
Así mismo, Marín pidió disculpas a los vecinos de Ciudad Real por “el lamentable espectáculo que en algunos momentos vivimos en el pleno del pasado viernes. Todos de alguna manera somos responsables de lo vivido. Si seguimos en este camino me temo que vamos a terminar como en el Parlamento de Taiwán, a mamporrazos, y nuestros vecinos no se merecen esto”.
“Cuando oficio bodas civiles en el salón de plenos, a los contrayentes y sus familiares les digo que están en el espacio más importante y emblemático del Ayuntamiento donde se debaten los temas más importantes para la ciudad. Pero una cosa es debatir, discrepar, tener disparidad de opiniones y otra muy diferente es llegar al insulto y desconsideración más absoluta”, sostuvo.
