El dolor por la ausencia y la alegría por mantener vivo el recuerdo han marcado este lunes los minutos previos al pistoletazo de salida de la feria y fiestas de Ciudad Real durante el nombramiento de los Ciudadanos Ejemplares 2023. Antonio Baptista y Lucilo Cuñado, los dos a título póstumo, además de Carmen Prado, han recibido el título más relevante que concede el Ayuntamiento de la capital en el salón de actos del Antiguo Casino, que ha estado abarrotado.

La dedicación al bien común, la abnegación, el servicio ejemplar, son atributos que según ha expresado el alcalde, Francisco Cañizares, han compartido estas tres personas, por lo que a la Corporación de Ciudad Real no le ha quedado otra que ser un “mero notario de una realidad”. Para el primer edil, que ha estado acompañado de la concejala de Festejos, Fátima de la Flor, el Pandorgo, Jesús Heredia, y de la Dulcinea, Gema Soto, los tres han representado “a la perfección” la figura del Quijote, que Carmen Prado y los familiares de Antonio Baptista y Lucilo Cuñado han recibido de forma física.
Antonio Baptista y el esplendor de la calle Postas

La vida de Antonio Baptista pasó inadvertida para pocas personas de Ciudad Real y la provincia. Pedro Lobo, empresario y amigo, ha recordado la trayectoria de este hombre que fue uno de los grandes impulsores del esplendor de la calle Postas, “al amparo del mercado de abastos”, desde la mercería familiar que dirigió con su hermano. Fue uno de los comerciantes más comprometidos en que esta calle fuera peatonal.
Pero no se quedó ahí, pues Baptista participó de forma activa en el fomento de las tradiciones más populares, como la Pandorga, y también dentro de la comunidad de feligreses. De hecho, fue uno de los fundadores de la hermandad de la Virgen de Alarcos, de la que fue presidente hasta los 80 años, y que está detrás de su propuesta para Ciudadano Ejemplar.
Su hija, Mónica Baptista, ha recordado que fue un ser “social, inquieto, con sentido del humor, un puro nervio, que no quiso pasar de puntillas por la vida”, y ha agradecido este “regalo” el mismo día que hubiera cumplido años. “El regalo es que la ciudad haya tenido a personas como tu padre”, ha respondido el primer edil durante este acto dirigido por el mismo pregonero de la feria, Javier Ruiz, y amenizado por el saxofonista Alberto Marín.
Lucilo Cuñado, “un hombre del Renacimiento en pleno siglo XXI”

Amigo y maestro, entusiasta, optimista, humano, “un ejemplo de vida para todos los ciudarrealeños”. Así fue Lucilo Cuñado, psicólogo burgalés que llegó para trabajar como funcionario del Estado hace décadas a Ciudad Real y que arropó a sus gentes desde el minuto uno, como dinamizador de empleo, empresario y colaborador en numerosas causas sociales, ha recordado la exconcejala del PP, María Ángeles Mur, que presentó su candidatura a Ciudadano Ejemplar.
“Eterno serás papá”, ha dicho su hija Luz Mila, muy emocionada, tras su reciente pérdida. Lucilo Cuñado dirigió el antiguo Inem, fundó una empresa, creó una plataforma de riesgos laborales a nivel provincial, también fue impulsor del colectivo de vehículos clásicos, y colaboró de forma directa con asociaciones en defensa de los gatos y de otras relacionadas con el alzhéimer y el cáncer infantil. Además tenía alma creativa: escribía poemas y pintaba cuadros, que todavía hoy cuelgan en las paredes de la Dirección Provincial de la Seguridad Social, donde terminó su vida laboral. “Fue un hombre humanista, del Renacimiento en pleno siglo XXI”, ha añadido su hija.
Carmen Prado Laguna y la enseñanza a “tantas generaciones de enfermería”

Y otra vida de dedicación al servicio público Ciudad Real y sus gentes: la de Carmen Prado Laguna, con más de 47 años de trayectoria primero como enfermera, después como directora de la Escuela de Enfermería y en último lugar como decana al frente de la Facultad de Enfermería de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM).
A punto de entrar a la jubilación, esta mujer “que está detrás de tantas generaciones de enfermería”, en palabras de Carlos Tirado, presidente del colegio profesional, tenía que pertenecer a esta lista. “Todos hemos pasado por tus manos, a todos nos han atendido personas formadas por Carmina”, ha añadido Cañizares.

Abrumada, Carmen Prado ha extendido el nombramiento “a todos los compañeros de profesión”, porque según ha expresado, “es mi condición de enfermera la que me ha conducido hasta aquí”. Sin olvidar el esfuerzo que realizaron en los momentos difícil del Covid, también ha señalado que la calidad de su trabajo siempre se debe “a las personas que nos rodean, a mis compañeros, a mis amigos y mi familia”.
Tras la entrega de una figura con la puerta de Toledo al pregonero y de una reproducción de la alcantarilla del Pozo de San Gil al saxofonista, el acto ha terminado con las proclamas tradicionales, ‘Viva Ciudad Real, la Virgen del Prado y los Ciudadanos Ejemplares’.