La entrada al trabajo este lunes ha sido diferente para muchos ciudadrealeños que, hasta hoy, nunca habían tenido que ‘fichar’ al entrar o marcharse de su puesto de trabajo pero que a partir de ahora lo deberán hacer cada día para cumplir con el Real Decreto-ley 8/2019, de 8 de marzo, de medidas urgentes de protección social y de lucha contra la precariedad laboral en la jornada de trabajo.
Con esta medida se pretenden evitar los abusos que algunos empresarios cometían con sus trabajadores ya que, según los datos de la EPA, en España se vienen haciendo más de 2,6 millones de horas extraordinarias sin que se las paguen, unas cifras que, según ha explicado a Lanza el secretario provincial de CCOO en Castilla-La Mancha se sitúan en 86.777 horas semanales que no se pagan y que podrían generar 2.600 puestos de trabajo estables.
El problema que se han encontrado muchos trabajadores este lunes, a pesar de que ha habido dos meses para que las empresas se ha adaptaran, es que no tenían ni idea de cómo ni dónde fichar. Así lo han explicado a Lanza dos trabajadoras de una céntrica cafetería que, además, reconocen que todos los días llegan al menos 15 minutos antes de lo que estipula su contrato y salen, como pronto, media hora después sin cobrar nada por esa casi hora diaria.
“Como no venga el jefe después a decirnos como lo tenemos que hacer, no sabemos nada”, explica una de ellas, que prefiere mantenerse en el anonimato como otros trabajadores con los que hemos hablado y que dudan que sea efectivo porque en sus empresas “no fichamos, entonces rellenar una hoja lo puede hacer el jefe cuando quiera y nosotros no tendremos más remedio que firmar lo que nos digan porque no vamos a perder el trabajo” indica un camarero.
Y es que la normativa no explica de qué manera deben actuar las compañías para llevar a cabo el control horario sino que lo deja en manos de un acuerdo con los trabajadores y lo único claro que hay en el texto es que el sistema escogido para hacerlo debe “registrar el horario concreto” del inicio y final de la jornada laboral. Si no lo hacen las multas pueden alcanzar los 6.250 euros.
Por eso José Manuel Muñoz destaca que este registro Horario es una herramienta muy importante si se utiliza bien y apela a los buenos empresarios “que son ma mayoría” para que apliquen esta medida que “era necesaria” para que, además, los trabajadores tengan la seguridad de que “van a cobrar las horas extras que echen”.
No obstante, y aunque en las primeras semanas la Inspección de Trabajo no va a multar, desde CCOO ya avisan que van a mantener una reunión con la inspección y van a estar vigilantes “con la intención de que quien no cumpla no solo tenga que pagar la multa sino que se implanten otros mecanismos porque a veces cuesta menos una multa que el pago de las horas”.
En su opinión, esta medida va a hacer que se equilibre el mercado laboral en lo que se refiere a quienes venían ofreciendo servicios por debajo del coste a costa de los trabajadores.
Los empresarios creen que esta norma se debería de haber hecho de manera progresiva
Desde FECIR, su presidente, Carlos Marín, señala que la jornada de este lunes está siendo “un auténtico caos”, ya que muchos de sus asociados están llamando constantemente “por las múltiples dudas” sobre este nuevo método.
“Esta normativa debería de haberse hecho con cabeza, ya que para las grandes empresas es muy fácil de implementar, pero para los pequeños comercios, establecimientos hosteleros, o en la agricultura, está siendo muy difícil”.
En este sentido, Marín ha avanzado que en las próximas semanas realizarán unas jornadas, junto a la Inspección de Trabajo, para intentar solventar estas dudas con sus asociados.
Reglamento específico para el campo
Por su parte, el sindicato agrario ASAJA reclama un reglamentario específico que recoja las situaciones especiales que se dan en la agricultura y ganadería porque “el campo no es igual que una oficina” y afirma que entre los agricultores y ganaderos está generando incertudumbre.
Pero mientras llega esa adaptación de la ley al sector, la organización agraria recomienda a los agricultores y ganaderos tener un libro de registro de todos los empleados que contemple la hora de entrada y salida, firmada por cada trabajador. ASAJA, de hecho, ha elaborado un modelo de registro para orientar a las empresas del sector a cumplir con esta normativa hasta que el desarrollo reglamentario introduzca un régimen particular para ellas.
Uno de los objetivos que persigue esta nueva normativa es el cómputo de horas extra. En este sentido, la organización agraria recuerda que el Convenio Colectivo del Sector Agrario de la provincia de Ciudad Real, en su artículo 10, establece que la jornada laboral será de 1.794 horas de trabajo efectivo al año, que la jornada media de referencia será de 40 horas semanales y, como máximo, 9 horas al día y 50 horas semanales, salvo jornadas especiales reguladas en el Real Decreto 1561/95.
También explica cómo ajustar las variaciones horarias en el campo. Estipula que el exceso sobre la jornada media de referencia se podrá acumular en vacaciones por acuerdo entre las partes en jornadas completas, sin que coincidan con los trabajos punta de la explotación.
Asimismo, ASAJA Ciudad Real lamenta cómo esta medida supone cargar de más burocracia al campo en lugar de facilitar los trámites, pero la organización ha querido trasladar un mensaje de tranquilidad al sector, puesto que ya han pedido al Ministerio que se adapte esta norma lo mejor posible a cada explotación y a cada territorio.