Fernando Mora: “Hay que salvar las viñas viejas y tenemos que transmitir a la gente el pequeño gran valor de estos viñedos”
Norrel Robertson: “La garnacha es una uva muy apta para el cambio climático que se nos avecina”.
Andreas Kubach: “Si hay falta de autenticidad en el vino, no hay calidad”.
Almudena Alberca: “ya está cambiando el mapa del vino en el mundo; esta situación en España será bastante complicada en el futuro”.
Fernando Mora comenzó la jornada hablando sobre el valor de las viñas viejas, aquellas que tienen una antigüedad entre 40 y 80 años, “que se autorregulan para que tengan uvas de mejor calidad y cuya maduración es más perfecta”. “Estamos de acuerdo, añadió, que esas viñas viejas producen menos, pero su material vegetal es singular y el sabor de su uva, único porque la composición de varietales es también única”.
En época de sequía, aunque esta viña suele estar en las laderas de las montañas, tiene raíces más profundas que la ayudan a sobrevivir y a hacer buena uva. “Las viñas viejas han visto un montón de inviernos; se han ido podando y esas cicatrices generan un cono de desecación que facilita mayor acumulación de azúcares y polifenoles”, explicó. No obstante, reconoció Mora que existe el gran problema de las clasificaciones: “En España los registros vitícolas son muy deficientes”.
Mora contó su experiencia en Aragón para recuperar viñas viejas, medio abandonadas, o trabajando con los “abuelos” de la zona para poner en valor sus grandes viñas viejas y comprobar que sus vinos son mejores. “Ayudadnos a salvar las viñas viejas y a transmitir a la gente el pequeño gran valor de estos viñedos”, concluyó.
Vinos auténticos y sostenibles
Andreas Kubach, enfocó su intervención sobre los “vinos que merecen ser bebidos y por qué”. “Deben ser auténticos y sostenibles”. Autenticidad entendida como componente cultural de un vino. “Si hay falta de autenticidad en el vino, no hay calidad”.
En su opinión, “hay que escuchar con cuidado a cada viña y a cada vino”. Y añadió: “Si el bodeguero interfiere demasiado, se hace un vino de estilo, y si interfiere demasiado poco, también crea un vino de estilo. Hay que hallar un sitio óptico entre la intervención mínima y máxima”. En cuanto a la sostenibilidad, “ésta comienza en lo económico, pasa por lo social y termina en lo medio ambiental”.
La uva garnacha
El escocés Norrel Robertson, que vive en Aragón desde hace 27 años, habló sobre la variedad de la uva garnacha en España. “En 30 años se han perdido 2/3 partes de la garnacha en nuestro país”. Es la cuarta variedad más plantada en el mundo. España y Francia son los países de mayor producción. Reconoce Robertson que los años 80 fueron pésimos para la garnacha.
Con la entrada de España en la CE, se tuvo que arrancar mucho viñedo, entraron variedades internacionales y aparecieron “clones” malos. Con la garnacha, Robertson apuesta por la viticultura sostenible, una variedad menos sensible y una uva muy apta para el cambio climático que se nos avecina.
Adaptación al cambio climático
Almudena Alberca, única mujer española que ostenta el título de Master of Wine, habló sobre las tendencias del mercado del vino en España. Se refirió, por ejemplo, a la sostenibilidad de los cultivos ecológicos o biodinámicos. “Tenemos que acompañar nuestra adaptación al campo climático”. Y alertó de que ya está cambiando el mapa del vino en el mundo: Esta situación, en España, será bastante complicada en el futuro”. “Inglaterra está haciendo unos espumosos de calidad, Alemania mejora la calidad de ciertas variedades noir”.
Añadió: “El tiempo ya no es predecible: puede haber pérdidas de las cosechas, impacto en la calidad de las uvas que estamos elaborando…” Alberca aseguró que los bodegueros de Burdeos, por ejemplo, ya está considerando el uso de variedades distintas para estudiar la uva que mejor se adapta a su zona.
Conversaciones líquidas de 4 Master of Wine
Kubach: “Hay un futuro brillante en esta país si somos capaces de llevar la realidad a la copa”.
Almudena Alberca: “Las Denominaciones de Origen defienden el territorio y mantienen un patrimonio, aunque deben proyectarse hacia el futuro dotando de herramientas a las bodegas”
Fernando Mora: “No hay cooperación real entre los que hacemos vino; tememos que el de al lado nos quite clientes”.
Norrel Robertson: “Los vinos perroflautas los hacen unos señores que tienen la osadía de ofrecer un terruño falso con los defectos que tiene ese vino”
En el apartado de “Conversaciones Líquidas”, estuvieron mano a mano Fernando Mora y Almudena Alberca. El primero consideró que “el viñedo se está volviendo hacia la montaña, y el mercado demanda vinos con menos grado de alcohol; esto no nos favorece en pleno cambio climático”. Alberca afirmó: “En realidad tiene que haber un compromiso para reducir los consumos energéticos; y esto en España va más lento”.
En cuanto al diálogo entre Andreas Kubach y Robertson, este último preguntado por la situación del mercado del vino español, aseguró: “la situación es positiva, hay un intercambio de conceptos y menos miedo de experimentar, aunque con el cambio climático estaremos más limitados en el futuro”.
Por su parte, Kubach considera que “vivimos el momento más emocionante que hemos tenido y el más bonito porque nos estamos haciendo mayores como productores”. En su opinión, “cantidad de expertos internacionales del vino son conscientes de lo que está pasando en España, que observa la sostenibilidad económica y medioambiental”.
Falta de personalidad en la gama media de vinos
Opina Kubach que en la gama media de vinos en España “falta personalidad”. “De qué sirve esa gama media si no hay forma de diferenciarla”, apostilla el master of wine hispano-alemán, para quien “hay un futuro brillante en esta país si somos capaces de llevar la realidad a la copa”.
En otro momento del debate, se habló de que los Consejos de las Denominaciones de Origen deben poner las reglas del juego, no decir cómo tienen que ser los vinos. Alberca considera que lo positivo de las D.O es que defienden el territorio y mantienen un patrimonio, aunque se deben proyectar hacia el futuro dotando de herramientas a las bodegas. Kubach señala que le parece legítimo que las D.O limiten “las salidas de olla de algún bodeguero; las D.O. evitan deformaciones del terroir”.
Miedo a los vecinos
Fernando Mora expuso en la mesa redonda final que “no hay cooperación real entre los que hacemos vino; tememos que el de al lado nos quite clientes”. “Tenemos mucho miedo a los vecinos”, añadió.
Andres Kubach resaltó que por primera vez “empezamos a superar la división entre vinos naturales y vinos no naturales”. “Este movimiento de vinos naturales es muy beneficioso; hay que superar los dogmas”, aseguró.
Por su parte el escocés Robertson alertó, en este sentido, sobre lo que denomina “vinos perroflautas”, “unos señores que hacen su vino, tienen la osadía de ofrecer un terruño falso con los defectos que tiene ese vino”. Coincidió en este sentido con Almudena Alberca que mostró su rechazo a este tipo de productores de vino: “Me molesta que los que no tienen formación se les ocurra sacar un vino natural”.
Sobre el vino en Castilla-La Mancha
Preguntado Kubach sobre la actual situación del vino en Castilla-La Mancha, afirmó : “La realidad es diversa y compleja; todos bajo un mismo paraguas no nos hace más fuertes”. Se refirió a la D.O de Uclés, con 5 bodegas, “que tiene una lógica geográfica y climática”. Y aseguró en este sentido que “hay que hacer Denominaciones de Origen de terroir.
Asimismo destacó que “hay bodegas en parte de la D.O La Mancha que tienen su identidad”. En toda la región hay una fuerte tradición viticultora, aunque reconoció que “la gran zona de producción de vinos sostenibles de calidad no se hace con vinos a granel; tiene que haber un equilibrio lógico entre competitividad y volumen”, concluyó.
Master of Wine o los grandes sabios del vino en el mundo
Master of Wine es el título que otorga el Instituto Master of Wine, en Reino Unido, y representa el máximo conocimiento y excelencia en el mundo del vino. Hay tan sólo 380 Master of Wine en todo el mundo. Seis de ellos son Master of Wine de España. Valladolid logró reunir esta semana en un brillante debate a cuatro de ellos: Fernando Mora, Andreas Kubach, Norrel Robertson y Almudena Alberca.
El británico Institute of Masters of Wine nace en 1955, aunque los primeros exámenes fueron dos años antes. Fue la compañía de vinateros, cuyo origen se remonta a la Edad Media, (1363), la que lo puso en marcha con el objetivo de certificar oficialmente a los comerciantes de vino británicos. Con un marcado carácter británico, en los años 80 comenzó a abrirse al resto del mundo. En 1988 un australiano fue el primer miembro no británico que obtuvo el Master of Wine.
Más sobre nuestros Master of Wine:
Almudena Alberca: Madrileña. Primera mujer española Master of Wine. Madrileña. Enóloga de Bodegas y Viñedos Viña Mayor, de Valladolid.
Andreas Kubach: hispano alemán. Co-fundador y director general de Península Vinicultores compañía que gestiona Bodegas y Viñedos Fontana, de Uclés.
Fernando Mora: Zaragozano. Ingeniero industrial. Bodegas Frontonio. Zaragoza.
Norrel Robertson. Escocés. 27 años trabajando en el mundo del vino en Aragón. Actualmente está en Calatayud, con su bodega El Escocés volante.