La escritora e historiadora del Arte Ángeles Caso ha reclamado el papel de la mujer a lo largo de la historia y su importancia en la construcción del devenir del mundo.
Lo ha dicho en la conferencia ‘Las mujeres también tienen historia’ dentro de un acto organizado en Corral de Calatrava por la Asociación de Desarrollo Rural Entreparques, en la que ha defendido la vida en los núcleos rurales como fuente de oportunidades.
Por ello, Caso, como neorural (vive en una aldea desde hace cinco años), ha reivindicado una mirada al campo para luchar contra el estigma de atraso y abandono, un “problema cultural que no existe en países de nuestro entorno como Francia, Alemania, Austria, Bélgica o Italia”.
“En España, ha sostenido, hay un menosprecio hacia lo rural clarísimo que se refleja en el concepto del paleto, que es terrible y ha hecho mucho daño”.
Sin embargo, la autora ha celebrado que “se esté empezando a hablar de la España vaciada”, que haya políticas específicas contra la despoblación y “que la gente se conciencie de que se puede vivir extraordinariamente bien en el campo”. Sólo desde esta sensibilización se podrá luchar, a su juicio, “contra lo que socialmente está considerado que te rebaja”.
‘Las olvidadas’ y más
Caso lleva trabajando décadas en la recuperación de la memoria de artistas y literatas invisibles en la historia, con libros como ‘Las olvidadas’, un referente, el más reciente ‘Ellas Mismas. Autorretrato de pintoras’, o el que va a publicar en breve: ‘Quiero escribirte esta noche una carta de amor’. En este caso, sobre una frase de la escritora neozelandesa Katherine Mansfield reúne una selección de cartas de amor de quince escritoras desde la Edad Media hasta mediados del siglo XX, en las que incluye biografías y “el papel peleón que tuvieron tanto en la vida pública como en la privada”.
Estas investigaciones están contribuyendo a visibilizar las valiosas aportaciones femeninas desde los ancestros porque, según ha explicado, es necesario que “la gente sepa que lo que nos han contado de que la historia ha estado protagonizada por hombres a lo largo de los siglos y milenios, y de manera excepcional por mujeres, muchas veces mal juzgadas, es un relato parcial”.
Para la escritora de ‘El peso de las sombras’, obra finalista del Premio Planeta 1994, se están dando decisivos pasos por las propias mujeres “para contar nuestra historia de otra manera”, en una suerte de divulgaciones “que nos dan mucha autoestima”.
Caso se ha revelado contra la idea de que “procedemos de largas sagas de mujeres domesticadas, grises, metidas en casa, criando niños y cuidando pucheros”, una verdad “relativa”.
A lo largo de sus indagaciones, ha percibido “que a las mujeres y a muchos hombres les entusiasma descubrir que siempre ha habido representantes de nuestro género haciendo cosas valiosas”, una consideración que nutre “la base de la igualdad”.
De esta manera, ha apostado porque en los colegios se enseñe “el relato de que las mujeres han sido tan protagonistas como los hombres en el devenir del mundo”, una manera de “sentar las bases firmes y enraizadas de la igualdad”.
Respecto a las mujeres rurales, ha considerado que aún son más invisibles y secundarias que las que viven en el ámbito urbano, debido al concepto despreciativo que en España hay de la vida en los pueblos y en los núcleos menos industrializados.
Factor clave
Al encuentro, celebrado con motivo del Día Internacional de la Mujer Rural, han asistido varias decenas de personas, sobre todo mujeres, y ha estado encabezado por José Juan Fernández Zarco, director general de Desarrollo Rural de la Junta de Comunidades, la diputada provincial Noelia Serrano, Rosa Suñé, primera teniente de Alcalde de Corral y Luis Alberto Lara, presidente de Entreparques.
Lara ha puesto de manifiesto el papel de la mujer en el desarrollo rural y su proyección “como factor clave” para fijar población. Ha recordado que desde el grupo de desarrollo local gestionan los centros de la mujer de Malagón y Horcajo de los Montes, así como el año pasado desarrollaron una campaña contra la violencia de género en los colegios, en la que participaron 2.000 estudiantes y 100 profesores.