El Jurado de la II Edición de los Premios de Arquitectura y Urbanismo de Castilla-La Mancha, organizada por el Colegio Oficial de Arquitectos de Castilla-La Mancha, ha hecho publicos sus ocho premios.
Entre los premios, en la categoría de vivienda nueva ha sido galardonada una casa de campo en Zafra de Záncara, a cargo del Estudio Canobardin; y en cuanto a obra nueva para otros usos, el premio va a parar a los alojamientos de turismo rural Dehesa Boyal, en Mariana.
También han sido merecedores de premios una obra de G+A Arquitectura –Constantino Antolínez y Eduardo Herrero– junto a otros dos proyectos. El segundo edificio premiado es la sala velatorio municipal en Casas de Lázaro, en Albacete, obra de Fernando Valenciano; y cierra el palmarés el Gimnasio Municipal de Corral de Calatrava, obra de Luis Carlos Peña.
En el epígrafe Arquitectura Rehabilitación, el premio ha sido para la ‘Rehabilitación de una Casa-Carbonería’ del siglo XVII en Toledo, obra de Joaquín Vargas. Mención especial se ha llevado la ‘Casa Reminiscente’ en Oropesa, Toledo, de Julio César Moreno, por la sencillez y naturalidad de la intervención.
En la Categoría 2, el Premio COACM de Urbanismo y Paisaje, se concede a la ‘Agenda Urbana Talavera de la Reina 2030’.
El Plan Director de las obras de la muralla de Talavera; la obre del CEI Amapola de Galápagos o la ‘Casa de la Sevillana’ en Sisante, Cuenca, también se han llevado diversos premios.