Los escolares ciudarrealeños trabajan, desde el pasado viernes, en casa. Las familias, recluidas en sus hogares desde hace cinco días, como medida de contención contra el coronavirus, viven de muy distinta forma los deberes y tareas online de sus hijos.
El objetivo es que estos quince días no supongan un parón de la formación académica pero sí que esta situación ha alterado las rutinas y obligado a una mayor autodisciplina que, en muchos casos, está generando ansiedad y estrés, sobre todo a aquellas familias con hijos en los niveles educativos más inferiores, Primaria. Su falta de autonomía, y de manejo de las herramientas digitales, hacen que dependan, casi de continuo, de sus padres. Si éstos, además, tienen que trabajar, ya sea de manera presencial u online, la situación se complica más y más, llegando a generar mucha ansiedad a los padres que ven imposible conjugar todo.
La presidenta de la Federación de Asociaciones de Madres y Padres Alfonso X El Sabio, Maribel Sánchez, ha indicado a Lanzadigital que no es factible para muchas familias, sobre todo con niños más pequeños, trasladar el colegio a casa y pretender que se siga el mismo horario.
Deberes y tareas sí, el colegio en casa no
En este sentido, recuerda que desde la Confederación Española de Asociaciones de Padres y Madres del Alumnado (CEAPA), se pidió que se mandar algunos deberes pero, en ningún caso, asegura, que el horario del colegio se trasladara, tal cual, a los hogares.
“En las familias donde hay dos o tres hijos en distintos cursos de Primaria y los padres trabajan, esta situación se ha convertido en motivo de angustia y preocupación porque los padres y madres ven, a diario, que es muy difícil seguir el ritmo marcado por los colegios, a la vez que acudir a trabajar y realizar, también, las labores domésticas”, subraya Sánchez.
Sin suficientes ordenadores en el hogar ni impresora
Además, indica, luego hay otra serie de problemas añadidos que también angustian a las familias como son el hecho de que no se disponen de ordenadores suficientes en los hogares, los más pequeños necesitan imprimir las fichas que les han mandado y muchos hogares no disponen de impresoras, y el hecho de que la plataforma online desde la que trabajan los centros educativos públicos de Ciudad Real, y de Castilla-La Mancha, Papas 2.0, está generando muchos problemas y está saturada aunque, recuerda, desde la administración se está trabajando para su mejor funcionamiento.
La presidenta de la Federación de Asociaciones de Madres y Padres Alfonso X El Sabio, Maribel Sánchez, indica, por último, que ante la posibilidad de que la suspensión de las clases se alargue, la CEAPA ya ha pedido que se alargue el final del curso académico y mover las fechas de los exámenes finales.
Con tres niños de 5, 7 y 9 años es “imposible”
Arantxa tiene tres hijos de 5, 7 y 9 años de edad y afirma, con rotundidad, que es imposible seguir el ritmo de tareas marcado por los profesores. “A las 9 de la mañana ya estamos conectados, yo con ellos porque son pequeños y no saben manejar el ordenador, y muchos días son las dos de la tarde y no hemos terminado”, asegura. Arantxa no trabaja fuera de casa, aunque su marido sí, no quiere ni pensar cómo se estarán apañando los que tienen que trabajar fuera o de forma online, pero aun así, indica, es imposible pensar en otra cosa que no sea en hacer tareas y deberes.
“Si a esta situación le añadimos el hecho de que no podemos salir y los niños están cansados, la situación se complica más y más”, explica. Además, se pregunta dónde quedan los consejos lanzados por los expertos de aprovechar estos días para hacer actividades en familia, como jugar, clases de deporte, manualidades… “yo no llego, es imposible”, añade preocupada porque esta situación, lejos de contribuir a ayudar, está generando mucho estrés en su familia.
Con 12 y 15 años en casa “está todo controlado”
Bien distinta es la situación que se está viviendo en casa de Isabel Garrido con dos hijos, Ricardo, de 12 años, en primer curso de Secundaria, e Isabel, de 15 y en cuarto también de Secundaria.
“Mis hijos están siguiendo el mismo ritmo que en el colegio y a las nueve de la mañana ya están trabajando con sus ordenadores y conectados con sus profesores”, explica. Isabel no considera que el trabajo que realizan sus hijos sea excesivo, más bien al contrario, subraya que es mejor así, “mejor tenerlos trabajando toda la mañana que sin saber qué hacer con la situación que estamos viviendo”.
Por las tardes también toca seguir un rato trabajando y haciendo deberes y, ya a media tarde, inventan juegos en familia, deporte, escuchar música o ver una película.
Isabel no ha querido dejar pasar la oportunidad que le brinda Lanzadigital de dar las gracias al personal de limpieza, repartidores, sanitarios, Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, cajeras, comerciantes de tiendas de barrio, periodistas, farmacias, trabajadores de las administraciones públicas, sacerdotes “que rezan por todos”, etc, por el gran trabajo que están realizando en estos momentos tan complicados.
En los últimos niveles, sobre todo entre los alumnos de 2º curso de Bachillerato, la principal preocupación es qué va a pasar con la EVAU, Selectividad, a la espera de que este mismo miércoles el Gobierno y las universidades fijen posturas.
Las AMPAS no han recibido quejas
Las Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos de Ciudad Real, consultadas por Lanzadigital, de momento, aseguran, no han recibido quejas de las familias.
Raquel, presidenta del AMPA del colegio público Carlos Vázquez, indica que las consultas de los padres van más encaminadas a recibir consejos de cómo repartir el tiempo y cómo organizarse en casa cada día. Además, muchas familias han expresado su malestar con el mal funcionamiento de la plataforma educativa Papas 2.0, lo que ha obligado, en muchos casos, a que los profesores agudicen el ingenio y utilicen otras herramientas educativas online.
No obstante, Raquel afirma que sí ha visto, sobre todo en redes sociales, muchas quejas de familias por el exceso de trabajos y tareas en los más pequeños y las dificultades que conlleva el poder compaginar el trabajo de padres y madres con la atención, y el seguimiento, de las tareas escolares de los niños.
En términos muy parecidos se ha expresado también Mar del Castillo, presidenta del AMPA Chaminade del colegio concertado Nuestra Señora del Prado, Marianistas. Mar indica que ninguna familia se ha quejado de un exceso de trabajo en casa. Además, recuerda, las familias de este centro educativo cuentan con una plataforma educativa propia, Educamos, que está funcionando muy bien gracias, también, al trabajo y compromiso de la comunidad educativa del centro.