Después del triduo oficiado por el canónigo de la catedral de Ciudad Real y hermano número 1 de la hermandad, Isidro Martín-Consuegra, la hoguera se prendió frente a la ermita de la Paz a cargo de los hermanos mayores de la hermandad, Alicia López y Eduardo San Martín, acompañados por el alcalde de Daimiel, Leopoldo Sierra, por el presidente de la hermandad, Daniel Martín-Consuegra, y el sacerdote daimieleño, Isidro Martín-Consuegra.
Los encargados del encendido agradecieron a la hermandad la invitación y confesaron sentirse “emocionados” y recordar “momentos muy gratos” de las anteriores hogueras.
Por su parte, el primer edil felicitó a los hermanos mayores y, en especial, al presidente de la hermandad “por ser capaz de organizar un acto tan tradicional de barrio”. Asimismo, Sierra deseo que la Virgen de la Paz “interceda con la paz entre todos nosotros”.
Además de los tradicionales puestos de comida y de la venta de 25 kilos de pitos y 21 litros de limoná, este año como novedad se ha instalado un bar a cargo de la Cofradía de Nuestra Señora de la Soledad. El dinero recaudado lo destinarán a la futura Casa de Hermandad de Los Corbatos.
La Banda Municipal de Música de Daimiel ha puesto la música con temas populares a los pies de la imagen de la Virgen de la Paz, que procesionó por el entorno de la ermita.
