El barrio de San Juan volvió a acoger la pasada noche la tradicional hoguera en honor a su patrón organizada desde hace unos años por la cofradía de María Desolada. La cita con la noche más corta del año estuvo iluminada y amenizada con música, sorteos y talleres para los más pequeños.
El presidente de ‘Los Capuchinos’, Javier Prado, explicó que desde las 21:30 horas se propuso un taller de confección de coronas de laurel y un concierto a cargo del grupo ‘Ares’ que ni el amago de tormentas frenó. Se detuvo en la gran acogida de los vecinos, valorando la respuesta ciudadana junto con la conmemoración de los 75 años de historia de la cofradía que se cumplen en este 2025 en ciernes.

Hasta las 23:30 horas la noche estuvo amenizada con música, tan solo interrumpida en torno a las 22:15 horas para dar paso a la ceremonia del encendido de la hoguera. Como dicta la costumbre, los asistentes al evento pudieron realizar un ritual donde se quemaba de forma simbólica todo lo malo del año y se pedían tres deseos.
El alcalde, Leopoldo Sierra, también se desplazó hasta la emblemática barriada daimieleña. Allí destacó la gran labor de la organización que, dijo, “se traduce en una gran afluencia” en cada edición.

El prendido de este año corrió a cargo de los dos hermanos mayores de la hermandad, el matrimonio formado por Manoli Espinosa y Jesús Sánchez. La pareja confesó haber recibido el nombramiento con “mucha ilusión”, en especial por su nombramiento conjunto, y por llevarlo finalmente a cabo tras la intentona fallida por el mal tiempo del año pasado.
Como complemento a la velada, se dispuso de un servicio de barra con tapas calientes a precios populares. Las consumiciones incluyeron la participación en un sorteo. Este se produjo al finalizar el concierto, momento en el que se rifaron varios lotes de productos típicos manchegos, vales y cupones como cortesía de los comercios locales que patrocinaron el evento.

Con esta jornada festiva, la cofradía continúa con la programación conmemorativa por sus 15 lustros. En la agenda, el triduo en honor a María Desolada del 18 al 21 de septiembre en la iglesia de Santa María.