El Centro de Mujer de Daimiel ha impartido al alumnado de tercero de la ESO del instituto Ojos del Guadiana la charla ‘Hacia la diversificación profesional’, con el objetivo de “aportar herramientas, sensibilizar en el cambio de estereotipos, y fomentar la diversificación en la orientación profesional, evitando que los estereotipos influyan en la elección de los estudios superiores”.
Así lo explica la responsable del área laboral del Centro de Mujer, Sara Astillero, encargada de impartir las charlas, señalando que “en estas sesiones se pretende aportar una reflexión que permita al alumnado tomar una decisión sobre qué estudios elegir o qué profesión les gustaría desarrollar, tomando en consideración sus aptitudes y personalidad, así como las demandas del mercado de trabajo y las salidas profesionales, dejando a un lado la elección profesional sexista”.
Condicionados por la sociabilización diferencial
Astillero hacía balance positivo de una actividad en la que el alumnado, “se ha dado cuenta de que no es consciente de que la sociabilización diferencial de género les condiciona y, por tanto, determina sus decisiones”.
A través de las charlas se les proporciona información de manera dinámica y provocando el debate, en base a conceptos como los estereotipos de género, la división sexual del trabajo y “las resistencias que aún hoy nos encontramos en el mercado de trabajo, que hace que se siga hablando actualmente de segregación horizontal y vertical, persistencia de roles de género o brecha salarial”. Por ello, “es fundamental conocer la diversidad de opciones profesionales que ofrece el Sistema Educativo y el mundo profesional, así como ejemplos de mujeres en profesiones en las que suelen ser minoritarias”.
Se trata de una iniciativa fruto de una colaboración entre los institutos de Secundaria de la localidad y el área laboral del Centro de Mujer, que se lleva a cabo “basándonos en la preocupación existente en el Instituto de la Mujer y la Consejería de Educación, ante los datos que constatan que persiste la elección de itinerarios profesionales tradicionales, sin tener en cuenta la inserción posterior, y la existencia de algunos ciclos formativos de Formación Profesional vacíos de chicas, así como la detección de carencias del profesorado en perspectiva de género”, explicaba Astillero.