El colegio San Isidro ha sido distinguido a nivel nacional por el Ministerio de Educación dentro de la convocatoria 2023 de los Premios Irene. Estos galardones reconocen “la importante labor de los centros educativos que contribuyen a prevenir y erradicar las conductas violentas, y a promover la igualdad y la cultura de la paz, procurando el desarrollo de estrategias de convivencia igualitaria entre hombres y mujeres, en el ámbito educativo”.
Es el caso del San Isidro que ha obtenido el segundo premio de su categoría por el Plan de Igualdad y de convivencia que vienen desarrollando en los últimos cinco cursos, tres antes de que estos planes fueran obligatorios en los centros educativos, como explicaba su directora Rocío Rubio.
Este proyecto integral se ha simbolizado con el nombre de ‘El vuelo de las mariposas’, basándose en la iniciativa ‘El latido de las mariposas’ que crearon Iziar Prats e Isabel Gallardo, cuyas vidas se cruzaron a raíz del trágico asesinato de las hijas de Itziar, Nerea y Martina de solo 6 y 2 años, a manos de su padre en septiembre de 2018.
Como respuesta a este durísimo caso de violencia de género, impulsaron un proyecto educativo y social “tiene una mariposa violeta” como símbolo de libertad, igualdad y homenaje a todas las víctimas. El colegio San Isidro participa en la máxima difusión de ese proyecto y desde su implementación ha implicado a toda su comunidad educativa en actividades en pro de la igualdad.
Un ejemplo práctico de los resultados del mismo es cómo, tras observar los espacios que ocupaban los chicos y chicas en el recreo, se ha favorecido el desarrollo de actividades físicas como el ping-pong, bádminton y rocódromo en sustitución del fútbol. De esta manera, el espacio de recreo se ocupa de forma igualitaria por niños y niñas, que antes estaban “más arrinconadas”, destacaba Rubio.
Esas acciones no solo se han reducido a las fechas clave o efemérides sobre igualdad y mujer. También se han trabajado en el día a día de las aulas, ayudando a eliminar estereotipos sexistas, a un lenguaje más inclusivo y a una disminución de situaciones conflictivas entre los alumnos y alumnas, reseñaba la directora.
El premio concedido está dotado con 3.000 euros y se destinará a seguir reforzando este plan en el colegio San Isidro.