El parque nacional de las Tablas de Daimiel a punto de secarse, con tan sólo dieciocho de las 1.850 hectáreas de terreno que son susceptibles de estar inundadas, “está perdiendo la vida por el uso excesivo de agua en la agricultura”, según las organizaciones ecologistas de la zona.
Una imagen en falso color tomada por el satélite Sentinel 2 de la Agencia Espacial Europea (ESA) el pasado día 21 de agosto de 2023 a la 13.10 horas muestra el lamentable estado en que se encuentra el parque nacional a finales del verano, con tan solo 18 hectáreas de superficie encharcada, lo que la deja en la peor situación de los últimos trece años.
Así lo ha señalado el profesor de Geografía Física de la Universidad de Castilla-La Mancha, Rafael Ubaldo Gosálvez Rey, quien es también vocal en el patronato nacional de las Tablas en representación de las ONGs ecologistas regionales. Gosálvez ha lamentado que se haya llegado a esta situación en el quincuagésimo aniversario de la declaración de las Tablas como parque nacional lo que, en su opinión, “es una vergüenza para sus gestores”.
Los cambios detectados por satélite
Tomando como base la imagen del satélite Sentinel 2, que forma parte del programa para la vigilancia mundial del medio ambiente Copérnico, ha explicado que la misión Sentinel 2 es una herramienta “muy poderosa” para la vigilancia ambiental que ayuda, entre otras muchas aplicaciones, a detectar cambios de las aguas continentales.
Imagen en Falso Color de las Tablas
La imagen obtenida para analizar la situación de las Tablas de Daimiel es una imagen denominada Falso Color, pues juega con una combinación de las bandas 3 (región verde del espectro electromagnético), 4 (región roja del espectro) y 8 (región del infrarrojo cercano) del satélite Sentinel-2.
Estas composiciones en color falso se emplean para diagnosticar el estado de la vegetación, ya que refleja las plantas en las bandas infrarroja y verde del espectro, mientras que absorben el color rojo. El suelo desnudo aparece en grises o en tonos pardos, mientras que el agua se muestra azul o negra.
En la imagen obtenida el 21 de agosto por Sentinel, el color dominante en esa fecha en las Tablas de Daimiel es un rojo muy intenso, que se corresponde con la superficie ocupada por carrizos y otras plantas helófitas y herbáceas y por tarayes, todas ellas invasoras, seguido de un color marrón que hace referencia a pastos y otras plantas terrestres, mientras que es residual el color negro, el que indica la presencia de agua, ha manifestado el profesor Gosálvez.
Se trata de una superficie aproximada de 18 hectáreas repartidas entre la zona de visita artificializada de la isla del Pan, donde habría 9 hectáreas de superficie inundada procedente de los pozos del Parque Nacional y otras 9 hectáreas inundadas que han quedado acantonadas en el cauce rectificado del río Guadiana por debajo de la presa de Morenillo.
Emergencia ambiental
La situación es calificada por el profesor Gosálvez como de “auténtica emergencia ambiental” y debería llevar a tomar una serie de medidas de carácter urgente, entre las que se encuentran la “reducción drástica del regadío” o, en su lugar, ha pedido incluso la aplicación al Gobierno de Castilla-La Mancha del artículo 155 de la Constitución Española por razones agrarias y ambientales.
En este sentido, ha señalado que “es necesario afrontar, si se quiere rescatar el parque nacional, la recuperación de los cauces naturales del Guadiana y el Gigüela, aumentar la vigilancia y las sanciones contra el saqueo del agua por parte de la agricultura intensiva, la demolición de las presas de Puente Navarro, Morenillo y Entrambasaguas e impedir todas las acciones en el parque que profundicen en su banalización y artificialización”.