Los socios de la peña equina Rocinante celebraron este sábado su vigésimo segunda ruta por los molinos harineros del Guadiana. Un trayecto que se inició desde la Laguna de Navaseca y al que se sumaban unas 120 personas, 40 caballos y 10 carros. El tiempo calmado acompañó por un recorrido que se detuvo en cinco de estas construcciones de Daimiel, hoy por hoy muy necesitadas de su restauración. La convocatoria se redujo a tan sólo un día debido a las previsiones meteorológicas que avanzaban lluvias para el domingo, según explicó el presidente de la peña, Luis Romero del Hombre Bueno.
Durante la mañana fueron testigo de este peregrinaje equino los molinos de La Máquina, El Nuevo, Griñon y Molemocho, donde la marcha se detuvo para repostar fuerzas.
En la tarde se recorrió la Laguna de Navaseca, terminando el pasacalle en el Recinto Ferial con verbena, según el programa; una planificación que contemplaba igualmente la actuación de la academia de baile Cristina Oviedo.
Entre los participantes, no sólo jinetes daimieleños sino también aficionados llegados desde Manzanares, Membrilla, Malagón, Urda, Torralba e incluso Madrid.
Para la ocasión colaboró la asociación de automovilismo, encargada de realizar un video con un dron, dejando así constancia de todo el recorrido.