Varios cientos de personas se han concentrado este mediodía en la Plaza de España de la localidad para reivindicar políticas que mejoren de manera efectiva este espacio natural en crisis. Actualmente tiene sólo 70 hectáreas están encharcadas de las 1.700 h inundables.
La convocatoria partió del Ayuntamiento, y su alcalde, Leopoldo Sierra, ha encabezado la movilización, bajo el lema ‘Salvemos a Las Tablas’, así como los portavoces de los grupos municipales del PSOE y del PP, Ramón Galiana y David Sánchez de Pablo, respectivamente, han leído la declaración institucional, en la que han pedido la autorización del trasvase que solicitaron en noviembre para que “imposibilite la ignición de las turbas”. “No podemos esperar a que la lluvia solucione este problema”, han señalado.
Ha sido, según los convocantes, una llamada de atención “a las administraciones competentes” para que el nuevo Gobierno se implique en la conservación del ecosistema que es único en el mundo.
Sierra ha destacado la urgencia del transporte de agua desde el acueducto Tajo-Segura hacia el parque nacional, dentro de lo que, a su juicio, ha de ser una política a máximos con carácter estructural que proteja integralmente el espacio, tal y como marca la ley.
“Quizá no sea la solución, ha reconocido, pero es la medida de emergencia que necesitamos en estos momentos” para cumplir los niveles que marca la normativa: una inundación de 1.400 hectáreas a final de primavera y de 600 tras el verano. “Vamos a intentar mantener esa estructura”, ha indicado en declaraciones a los medios de comunicación.
Frente a políticas “coyunturales y puntuales, tenemos que preocuparnos del parque año a año”, ha reivindicado el primer edil daimieleño, a la vez ha recordado que la Comisión Mixta de Gestión de los Parques Nacionales de Castilla-La Mancha (Estado y Junta de Comunidades) instó hace un par de meses a la comisión central del Tajo-Segura a que “tomara en consideración” el de 20 hectómetros cúbicos, tal y como recoge el Plan Rector de Uso y Gestión (PRUG) del parque.
“Si queremos conservar el ecosistema, ha agregado Sierra, tenemos que poner todos los medios para su conservación y esa misión no vale con medidas a corto plazo”.
Declaración
Esta demanda se plasmaba en el comunicado que han leído los ediles para pedir al Ministerio desde el Ayuntamiento de Daimiel que cumpla la ley y apruebe el trasvase, la única medida “urgente e inaplazable”. A su juicio, “está en riesgo la supervivencia de un humedal único”, y de no llevarse a cabo, “la situación en nuestro humedal podría ser irreversible”.
La demanda, según han recordado, no ha sido atendida por ahora, porque, al parecer, los responsables nacionales del parque confían en el que el déficit de recarga “se resuelva únicamente con las lluvias futuras”.
Pero la realidad, a su juicio, no deja lugar a dudas, y “la degradación absoluta” por las turbas detectadas en el cauce del Guadiana, a 10 kilómetros de Las Tablas de Daimiel, un escenario similar, han dicho, al de 2009 cuando hubo que realizar un trasvase de agua para combatir los fuegos latentes del subsuelo.
“Las condiciones actuales son propicias, han argumentado, a que puedan aparecer algunas fumarolas más en el río”, y no tanto en el parque, si bien hay voces técnicas que apuntan “a un empeoramiento de la situación en verano si no llueve y el nivel freático continúa bajando”.
Por ello, más allá de los sondeos de emergencia previstos en el PRUG, o de “plantear enfrentamientos con sectores estratégicos como la agricultura”, hay que tomar “medidas complementarias y transversales para el medio y largo plazo”, han declarado.
“Estamos ante una situación crítica y extrema y hay que tomar decisiones que eviten que la situación sea irreversible”, han reiterado, a la vez que han apelado a la concienciación de la población local para que llevar a cabo “pequeñas acciones” en apoyo del espacio. Ha sido el caso de niños y jóvenes que han participado en la manifestación y han esgrimido carteles alusivos a la defensa del humedal.
A la concentración también han acudido dirigentes del PP, como su presidente provincial, Francisco Cañizares, las diputadas nacional y regional, Rosa Romero y Lola Merino, respectivamente, además de otros representantes locales y provinciales.