Noemí Velasco
Manzanares
El queso manchego, el vino y el Quijote, los “tres grandes embajadores” de La Mancha en el mundo, han convertido a Manzanares en la ‘encrucijada’ de la gastronomía de Ciudad Real, una provincia en la que los chefs más reconocidos conquistan paladares con los mejores productos de esta tierra, en la que las queserías apuestan cada vez más por la elaboración tradicional con leche autóctona y donde los hosteleros han comprendido que hacer marca pasa por poner en valor lo local. La segunda cita de ‘Sabores del Quijote’ en la provincia trajo ayer a Manzanares, en palabras del presidente de la Diputación, José Manuel Caballero, la “exaltación del queso manchego”, un producto propio “de máxima calidad” que “impulsa la economía” y que “permite fijar población en el territorio y el desarrollo de las zonas rurales”.
Representantes de la Junta, diputados provinciales, alcaldes y concejales de diferentes colores políticos unieron fuerzas en la mañana de ayer para “representar los intereses de la tierra” en la inauguración del evento gastronómico, cultural y festivo con el que la Diputación provincial, con la colaboración de los Ayuntamientos, quiere aprovechar los datos positivos que cosecha el sector agroalimentario y la moda de la ‘alta cocina’ para mantener la senda ascendente del turismo. Junto al alcalde de Manzanares, Julián Nieva, y el presidente del Grupo de Acción Local Alto Guadiana Mancha y también alcalde de Argamasilla de Alba, Pedro Ángel Jiménez, el presidente de la Diputación provincial destacó en la carpa instalada en La Pérgola que el queso manchego tiene mucho que ver “con mejorar las condiciones de vida”. “En la provincia hemos apostado por el sector agroalimentario y lo hacemos desde la tierra, desde el origen, desde la producción de los pastos que dan de comer al ganado que produce la leche”, dijo.
Con una media de consumo de queso en España de 8 kilos anuales, frente a los 17 kilos de Europa, José Manuel Caballero animó a comer más queso, de denominación de origen y también del que no la tiene pero que producen queserías de la provincia con una alta calidad; e hizo referencia a sus propiedades, pues el 60 por ciento del calcio que necesita el organismo lo puede aportar el queso. Los datos de exportación en el ámbito de la agroalimentación arrojaron en Ciudad Real el año pasado cifras espectaculares, con 1.600 millones de euros facturados, y en torno a 1.000 millones relacionados con las bebidas y los quesos, con países con gran demanda como Estados Unidos, donde acaba el 46 por ciento del total de los quesos vendidos en el extranjero. Así pues, José Manuel Caballero esperó que el sector del queso mantenga la generación de beneficios económicos, que permita “que ganen dinero los industriales y también los ganaderos, los pastores que cuidan los animales”, para dar viabilidad dignamente a sus modos de vida en las pequeñas localidades de las zonas rurales de la provincia.
Con nueve establecimientos hosteleros desplegados en el recinto para garantizar una exquisita degustación de tapas, el alcalde de Manzanares, Julián Nieva, tras agradecer “el compromiso de la Diputación con la promoción de los productos de la provincia”, reconoció el trabajo de los hosteleros dentro del evento y fuera, pues, según aseguró, “el queso manchego es un producto que está muy introducido en nuestra gastronomía y en nuestras recetas, desde el primer plato hasta el postre”. El primer edil esperó que la combinación de gastronomía y cultura sean un tándem perfecto el fin de semana a través de este producto “ligado íntimamente a la provincia, pero singularmente a Manzanares”, que cuenta además con un Museo del Queso y con dos queserías que exportan a todo el mundo.
Comprometido con la idea de “promocionar los municipios y consolidar población”, el presidente del Grupo de Acción Local Alto Guadiana Mancha, Pedro Ángel Jiménez, felicitó también a la Diputación por poner en valor “este producto que identifica a todos los manchegos, a la provincia y a Don Quijote y Sancho, pues era Sancho al que más le gustaba el queso y el vino”. Asimismo, animó a poner sobre la mesa ideas relacionadas con la gastronomía, el turismo y el comercio para aprovechar los 4 millones de euros designados a través de fondos Feader a los quince municipios que constituyen el grupo de desarrollo rural.