B.R./Lanza
Ciudad Real
Agentes de la Guardia Civil han detenido en el municipio malagueño de Coín a Miguel Silva, que se había fugado tras un permiso carcelario cuando cumplía condena por matar en abril de 2003 en el barrio del Pino de Puertollano a Manuel Utrera, un joven de 18 años. Según confirmaron ayer a Europa Press fuentes cercanas, la actuación, conocida como 'Operación Marea Azul', se produjo algo más de un mes en Coín. Los investigadores habían detectado la presencia de un individuo en el citado municipio cuyas características físicas encajaban con las del fugitivo.
Así, establecieron un dispositivo de vigilancia en torno a la casa donde se escondía Miguel Silva Fernández, alias 'El Macho', ubicada en una zona residencial de la citada localidad, según informó ayer el diario 'Sur'.
Los agentes comprobaron que sólo abandonaba el inmueble en contadas ocasiones, tomando siempre medidas de seguridad, y observaron que eran unos familiares los que se encargaban de abastecerlo.
El operativo culminó a finales de diciembre cuando fue arrestado el individuo, que, según el diario, se identificó con la documentación de otra persona con la que comparte rasgos físicos similares, lo que añadió a su imputación otro presunto delito de usurpación de estado civil.
Silva cumplía una pena de 23 años de prisión en el centro penitenciario de Madrid VI por los delitos de homicidio doloso, robo con violencia, allanamiento de morada y tenencia ilícita de armas.
En otoño de 2006 la Audiencia Provincial condenó a Miguel Silva y a José Amador de Cádiz como presuntos autores del homicidio de Manuel Utrera, el 23 de abril de 2003, en su casa de la calle Callao de Puertollano, a la que se supone que habían entrado para robar.
El caso es conocido porque es el antecedente que desencadenó, meses después, la reyerta entre los Silva y los Cádiz, en el barrio de San Martín de Porres de Ciudad Real, que terminó con un padre y un hijo asesinados por miembros de la familia Silva. Por aquello fue condenado el padre de Miguel.