La vendimia ya ha comenzado en muchas partes de Castilla-La Mancha con las primeras varietales tempranas. Posteriormente, les tocará el turno a las variedades de uva más abundantes y que más tiempo llevan fundidas junto al terruño manchego. Se prevé una cosecha un 20% superior a la del año pasado con una muy buena calidad, en términos generales. Eso sí, algunos viticultores de la Comunidad Autónoma han decidido renovarse y optar por las nuevas tecnologías en lugar de acudir a los métodos tradicionales basados en la recogida a mano de la uva. Y es que la vendimia mecanizada cuenta cada vez con más adeptos dentro del territorio regional.
Bodegas Yuntero
El presidente de Bodegas Yuntero, Felipe Rodríguez, explica a Lanza que durante la presente campaña de vendimia, que ya ha empezado con la recolección de las primeras varietales tempranas de uvas blancas como la moscatel de grano menudo y el chardonnay, “vamos a mantener la calidad de la uva que teníamos hasta ahora”. A este respecto indica que “la calidad del campo es buena y no hemos tenido una pluviometría excesiva. Sí que la tuvimos cuando la teníamos que tener, que fue en primavera, mientras que el verano ha sido seco”. Por todo ello señala que este año “esperamos obtener una cosecha mayor respecto a la campaña anterior, y que puede ser en torno a un 20% superior, ya que el año pasado fue muy baja”.
Desde la Cooperativa Jesús del Perdón de Manzanares, que actualmente cuenta con 854 socios, basan buena parte de su éxito en la calidad de los vinos que elaboran. Para ello han decidido cuidar especialmente la recepción de la uva, dándole un tratamiento especial y centrándose en recolectar parte de los varietales tempranos durante la noche. El objetivo es que lleguen a la bodega antes de la una y media de la tarde en las mejores condiciones posibles y con la temperatura adecuada, sin que la uva se vea castigada por los excesivos rigores del periodo estival. Eso sí, para el resto de variedades que tienen mayor producción, como puede ser la uva tinta cencibel, conocida en otras zonas de España como tempranillo, la recepción de la uva ya se realizará durante todo el día.
Poco a poco la actividad de lo que es una vendimia normal en Bodegas Yuntero está empezando a desperezarse y la maquinaria de la cooperativa comienza a coger velocidad de crucero. Así, desde finales de la semana pasada y principios de esta semana en la bodega han empezado a recepcionar principalmente uvas de moscatel de grano menudo, chardonnay y sauvignon blanc. Con el paso de los días, y una vez que se vayan vendimiando los viñedos de las varietales que tienen una mayor producción, también irá aumentando la recolección de la uva en la bodega hasta poder molturar en plena campaña en torno a los 3 o 4 millones de kilos de uva blanca y entre un millón y medio o dos millones de uva tinta.
No hay que olvidar que la Cooperativa Jesús del Perdón es la segunda cooperativa con más producción de toda España, embotellando el 5% del vino que produce. “Sí que es cierto que también hacemos botellas de vino grandes que exportamos a países como Francia, Alemania o Inglaterra, lo que pueden calificarse como vinos a la carta que nos dan mucho valor añadido a nuestros vinos”, indica Rodríguez.
Quizá uno de los pocos mercados internacionales que le queden por conquistar a Bodegas Yuntero, según comenta su presidente, es el del gigante asiático. “Estamos prácticamente en todos los mercados. Y, cuando despegue China, queremos estar allí bien situados. Para eso ya contamos con un comercial nativo. Es una apuesta que requiere de un gran esfuerzo económico, pero creemos que a largo plazo nos dará beneficios cuando China despegue y todo vuelva a la normalidad. En ese momento, estaremos allí situados en las primeras posiciones”.
Debido a su elevada producción, y con el fin de agilizar todo el proceso, Bodegas Yuntero cuenta esta campaña con una nueva y flamante planta embotelladora capaz de embotellar 5.000 botellas a la hora (frente a las 2.500 que embotellaba la antigua) y que puede llegar hasta las 10.000 botellas a la hora si las circunstancias de producción así lo requieren.
Concretamente en esta planta embotelladora, así como en un jaraíz nuevo, en una depuradora y en la tienda que se quiere enfocar al enoturismo, entre otras infraestructuras, “se han invertido este año más de 7 millones de euros”, según explica el presidente de Bodegas Yuntero, todo ello enfocado a beneficiar directamente a los socios con el fin de “reducir las largas colas que se forman en determinados momentos cuando se está recepcionando la uva y para que el tiempo de espera sea el mínimo posible”. Esta circunstancia también repercute positivamente en la calidad de la uva, puesto que “de esta manera permanece menos tiempo fuera cogiendo temperatura”.
Enoturismo
Uno de los principales objetivos que se marcaron desde la Cooperativa Jesús del Perdón hace relativamente poco tiempo fue el de aumentar la presencia de la bodega en los organismos y foros relacionados con el mundo del vino algo que, “poco a poco vamos consiguiendo”, según afirma Felipe Rodríguez. A este respecto, el presidente de Bodegas Yuntero señala que ahora otro de los fines pasa por fomentar el enoturismo y la cultura del vino con el fin de que la gente conozca la historia de la bodega y sepa por qué Manzanares está vinculada al mundo del vino y arraigada con el terruño. Para tal fin, desde la cooperativa esperan tener terminado dentro de 3 o 4 meses una tienda y una sala de catas. “La Cooperativa Jesús del Perdón ya tiene muchos años. Y en ella hay elementos con mucho encanto y que se pueden encontrar tanto en la parte antigua, con la sala de barricas y una nave de depósitos antigua, como en la parte moderna, con las oficinas y el laboratorio”, apunta Rodríguez.
También se pretende construir un pequeño museo “aprovechando la historia de la bodega, con fotos antiguas y recuerdos de la gente que ha pasado por aquí”.
Para Rodríguez, “desde Bodegas Yuntero queremos dar ese paso de gigante y fomentar el enoturismo, algo que en La Mancha no se explota como en el resto de España. Queremos aprovechar el excelente nudo de carreteras que vertebra Manzanares de norte a sur y de este oeste, con la N-4 y la A-43, ya que es importante que la gente que haga turismo por la provincia pueda venir a visitar la Cooperativa Jesús del Perdón de Manzanares y sepa el encanto que atesora la bodega y conozca la historia que tiene. Para ello vamos a conjugar en perfecta armonía la parte antigua con la moderna de las instalaciones”.
Covid-19
Pero el sector del vino tampoco ha sido ajeno a la crisis y a la ‘nueva normalidad’ que ha provocado la aparición de la Covid-19. Por este motivo, desde Bodegas Yuntero tienen que extremar las precauciones y las medidas sanitarias y de seguridad establecidas, aún más si cabe, durante los días de vendimia. Así, “y por el hecho de que queremos tener una vendimia tranquila en lo relativo al coronavirus, desde la bodega estamos extremando las precauciones. Para tal fin, todas las personas tienen que pasar con mascarilla obligatoriamente y no se pueden bajar de sus vehículos excepto para entregar información o para descargar, en este caso, la uva. También hemos establecido medidas de limpieza como gel hidroalcohólico en varios puntos y hay que mantener la distancia de seguridad de 2 metros mínimo con cualquier trabajador o persona de la cooperativa”.
Fundada el 20 de marzo de 1954 por un grupo de 102 viticultores que se vieron en la necesidad de elaborar y comercializar los productos obtenidos de sus explotaciones y defenderse así de la especulación a la que se veían sometidos, la Cooperativa Jesús del Perdón-Bodegas Yuntero es hoy en día una bodega puntera dentro de su sector y elabora numerosos vinos de calidad bajo las marcas ‘Yuntero’, ‘Epílogo’, ‘Lazarillo’ y ‘Mundo de Yuntero’, este último ecológico.
El Progreso
Bodegas El Progreso de Villarrubia de los Ojos también ha comenzado esta semana la vendimia de la uva blanca chardonnay, a la que seguirán las variedades verdejo y cencibel de secano. Posteriormente, ya la semana que viene, les tocará el turno a otras variedades de uva como la tempranillo o cencibel de regadío y la verdejo. Así hasta llegar al resto de variedades que hay plantadas en la zona, por lo que la vendimia en El Progreso podría extenderse hasta la primera semana de octubre.
Según explica el director técnico de la bodega, Juan Nieto, este año esperan obtener una producción en torno al 20% superior a la del año pasado y que podría rondar los 75 u 80 millones de kilos de uva, frente a los 62 millones de kilos que se recepcionaron el año pasado. Los técnicos de la cooperativa también estiman que “la graduación de alcohol va a ser inferior a la de la anterior campaña”, mientras que “la sanidad y calidad del fruto será buena, ya que la uva viene sana y no hay ninguna enfermedad que haya dañado al viñedo, por lo que esperamos una buena calidad”. Por todo ello, desde El Progreso creen que la tónica dominante en la vendimia vendrá marcada por un producto de “alta calidad”.
Precisamente a principios de esta semana, los técnicos enólogos de El Progreso llevaron a cabo la última de las prospecciones de campaña que se realizan sobre el viñedo, las cuales se vienen haciendo desde hace varias semanas con el fin de conocer el estado en el que se encuentra la uva. Durante los citados análisis, se observó como la “calidad del fruto es excelente porque las cepas están más descargadas”, según informan desde la propia bodega.
Fundada en 1917, la Cooperativa El Progreso dispone de una planta embotelladora capaz de embotellar 1.500 botellas a la hora y tiene entre sus vinos más representativos las marcas ‘Ojos del Guadiana’, ‘Jijones’, ‘Huertos de Palacio’, ‘El Progreso’ y el mosto parcialmente fermentado ‘Viña Xétar’. En el año 1967 esta cooperativa afrontó un gran cambio que la llevó a convertirse en una de las empresas más grandes de su tiempo mediante la fusión de otras dos sociedades cooperativas agrícolas que había en Villarrubia de los Ojos como La Manchega y La Labradora.
Dentro del mercado internacional, El Progreso exporta sus vinos a Estados Unidos y China, así como en los principales países europeos como Alemania, Polonia, República Checa, Francia y Bélgica, por citar algunos de los más representativos.
Si algo va a caracterizar también a esta vendimia será el Plan de Contención por la Covid-19. La cooperativa ha implantado unos protocolos sanitarios con el fin de adecuar la bodega para poder cumplir con todos los protocolos de seguridad tanto en las descargas de uva, como en el proceso interno de la bodega para evitar que se produzcan contagios. Por ello, es obligatorio el uso de la mascarilla dentro de la bodega, mantener la distancia de seguridad, el uso de gel hidroalcohólico, etc. Asimismo, se realizarán test a todas las personas que vayan a participar en la campaña de vendimia.
Virgen de las Viñas
Virgen de las Viñas Bodega y Almazara de Tomelloso ha comenzado la vendimia esta semana con la recogida de los varietales. El presidente de la cooperativa, Rafael Torres, señala a este medio que se está recogiendo el chardonnay «por la noche, algo habitual».
El arranque de la vendimia, señala Torres «se está desarrollando muy bien. En comparación con el año pasado está habiendo un 30 por ciento más de cosecha en las pocas viñas que se han recolectado». El lunes, primer día de campaña «entraron en la bodega 300.000 kilos». Torres destaca que «el precio del vino es barato. Además, vamos a tener dificultades de almacenamiento. De hecho, ya hemos alquilado envase para poder meter toda la cosecha».
Hasta primeros de septiembre, ha adelantado Rafael Torres, no se generalizará la recogida de la airén. Con respecto al tempranillo «será el laboratorio, en base a las muestras que están trayendo los agricultores, el que nos dirá cuándo se va a empezar».
Torres ha calificado el comienzo de vendimia como bueno, con un aumento de la cosecha, aunque el precio del vino no sea caro. En cuanto a la mano de obra «los agricultores no han expresado dificultades a la hora de encontrar personal, aunque la recolección se lleva a cabo a un 50 por ciento a mano y a máquina».
Con casi 60 años de historia, Virgen de las Viñas Bodega y Almazara de Tomelloso tiene en la marca ‘Tomillar’ a uno de los principales exponentes de sus vinos dentro del mercado nacional e internacional. Desde el año 2005 la bodega ha sufrido una profunda transformación tecnológica que ha posibilitado incrementar notablemente la calidad y el rendimiento de sus instalaciones, cumpliendo también satisfactoriamente con las exigencias de los mercados.
En la actualidad, además de elaborar vinos de gran calidad, los cuales han recibido el beneplácito y el aplauso de los profesionales relacionados con el mundo del vino, la bodega realiza una decidida apuesta por el enoturismo. Para tal fin Virgen de las Viñas cuenta con un museo etnológico, situado en el Lagar, que constituye el edificio más antiguo y emblemático de la cooperativa. También destaca el Museo de Arte Contemporáneo Infanta Elena, que alberga una colección permanente de la Bodega y Almazara, y que se nutre de exposiciones temporales de diferentes artistas, así como de las obras que concurren en el prestigioso Certamen Nacional de Pintura. Continuando en el terreno cultural, dignos de mención es también su Certamen Cultural en el que se entregan premios de cultura, escultura y periodismo.
Vendimia mecanizada
Los hermanos Blas y Fernando Romero, viticultores y naturales de Membrilla, poseen unas 70 hectáreas de viñedo en el término municipal de Manzanares. Con la llegada de la reestructuración varietal decidieron cambiar todo el viñedo que tenían y plantarlo en espaldera, concretamente con las variedades tintas merlot y cencibel y las blancas verdejo, Sauvignon blanc y moscatel de grano menudo.
Blas, que esta semana ha comenzado la vendimia junto a su hermano y su hijo José Carlos, explica a Lanza que anteriormente realizaban la recogida de la uva a mano, utilizando una cuadrilla de unas 20 personas. “Ahora nos hemos comprado una maquina para recolectar la uva de las viñas en espaldera, con lo cual con tres personas tenemos suficiente para realizar el trabajo”. De esta manera, la vendimia tradicional ha dado paso a la vendimia mecánica. Y es que en La Mancha los viticultores y agricultores también han sabido renovarse y adaptarse a los nuevos tiempos.
Para Romero “la vendimia se realiza de una forma más rápida siendo mecánica. Además, la uva llega en mejores condiciones a la bodega o a la cooperativa, puesto que la máquina limpia las hojas o los escobajos que pueden ir junto al fruto y en un tiempo de una hora u hora y media hemos llenado el remolque del camión, con lo que el fruto recolectado no tiene que sufrir ni soportar las elevadas temperaturas del verano en La Mancha”.