Aurelio Maroto/E. P.
La Solana
El parque empresarial ocupó un gran protagonismo durante el desayuno informativo concedido por el alcalde de La Solana, Luis Díaz-Cacho, para analizar el año recién terminado y profundizar en los retos del actual. Es uno de los grandes desafíos a corto y medio plazo, una vez salvado el primer escollo: su desbloqueo. “Ha sido una decisión estratégica con un esfuerzo de la Corporación que nos permitirá disponer del suelo público que nos falta”, dijo Luis Díaz-Cacho. Ya se ha definido la primera fase para urbanizar 14.000 metros, incluso se han destinado los primeros 50.000 euros de la Diputación provincial para terminar la avenida principal del polígono.
“El parque empresarial puede ser un revulsivo”. El primer edil reveló que, sobre el papel, hay en torno a 70.000 metros cuadrados comprometidos, “pero si vendiéramos para empezar 20 o 30 mil metros ya sería un exitazo”, admitió. Y confirmó que hay empresas de industria agroalimentaria, de La Solana y de fuera, muy interesadas en instalarse.
Al margen del parque empresarial, Díaz-Cacho habló del presupuesto municipal para este año, que salió adelante gracias a la abstención de IU. “Para mí es un hito aprobarlo tras cuatro presupuestos prorrogados en seis años. Facilita la gestión”. En este sentido, valoró la salud económica de las arcas municipales. “Pagamos a proveedores en una media de cinco a ocho días y hemos acabado con 1,3 millones de euros en caja”. Pero le preocupa lo que llamó injerencias del gobierno nacional y leyes Montoro. “Estamos cambiando la deuda a medio y largo plazo, más sostenible, por deuda a corto plazo, más volátil, que nos quita dinero de caja”. “Podría obligarnos a operaciones de tesorería para pagar las nóminas. Es perverso, nos estamos descapitalizando”. No entiende tal corsé cuando el Gobierno estatal y las CCAA incumplen y soportan el 97% de la deuda nacional (1,1 billones de euros), y parece que la culpa es de los ayuntamientos cumplidores, el 3% de esa deuda.
Por otra parte, habló de la puesta en marcha del autobús urbano, con casi 15.000 usuarios en sus primeros seis meses. “Un servicio puesto en marcha con lógica, que podrá ser ampliado si hay necesidad”. También destacó la recuperación del viejo Centro de Salud, revertido al Ayuntamiento. En accesibilidad, dijo que trabajan en hacer un casco histórico accesible, aumentando las llamadas ‘plataformas únicas’, y prometió mejorar el aparcamiento.
En cuanto a seguridad, habló de un proyecto de video seguridad callejera que está en marcha. El Ayuntamiento de La Solana se ha marcado para este 2017 convertirse en “uno de los pueblos más seguros” de la comunidad autónoma y con este objetivo pretende chequear la entrada y salida de vehículos del municipio.
El alcalde también citó en varias ocasiones las palabras inclusión e integración, y por ello, destacó el plan de inserción local con recursos propios, las ayudas para emergencia social y un convenio con Cáritas. “Eso que se llama pobreza energética llevamos haciéndolo en La Solana cuatro o cinco años, pagando cortes de luz o agua para facilitar la convivencia en lo más básico”. Por otra parte, manifestó su preocupación por el desempleo, pese a haber bajado un 17,4% el dato interanual, y habló de facilitar todo el empleo social que se pueda.
Igualmente, destacó la estrecha relación con el tejido asociativo. Puso como ejemplos la carpa de Carnaval o el revivir matinal de la feria. Por cierto, avanzó que volverán los premios en metálico el próximo Carnaval. “Gestionamos la cultura y el turismo con ideas y colaboración público-privada”. Al respecto, avanzó datos del último Festival de Cine y Vino, que arrojó un superávit de entre 1.500 y 2.000 euros sobre un presupuesto de 20.000.