J. Y.
Ciudad Real
El joven alcazareño, J.J.E.M., acusado de cuatro delitos de abusos sexuales a una menor por los que se enfrenta a penas de entre 18 y 20 años de cárcel, negó este martes en el juicio que se abrió en la Sección Segunda de la Audiencia provincial lo cargos que se le imputan al desmentir que hubiera mantenido hasta cuatro relaciones sexuales completas con la era su novia, una niña de 12 años (cuando ocurrieron los hechos).
Por su parte, la víctima, que ahora tiene 15 años, mantuvo su versión de que el procesado abusó de ella (previas amenazas de romper la relación) en el corto noviazgo que mantuvieron, entre febrero y marzo de 2012.
El abogado que representa al acusado, Antonio Ramírez, explicó a los medios que el joven (entonces con 18 años) y la niña “se vieron cinco veces” en su corta relación y en la misma “no hubo ni abusos ni agresiones sexuales como señalaba la demanda”.
Minutos antes de entrar en el juicio, que se celebró a puerta cerrada, este letrado aseguró que la víctima “miente”, a tenor de un informe forense que pone de manifiesto “que hay contradicciones, tanto de ella como de su madre”.
Por ello, esta defensa pedirá la libre absolución de su cliente, según anunció, así como argumentó que “no es lógico que en una relación de 15 días en la que se vieron cinco veces, en cuatro hubiera relaciones sexuales consumadas”.
El abogado reconoció, tal y como la eximente que contempla el escrito del fiscal, que el joven padece “un déficit funcional psíquico y mental”, como así lo recoge un informe certificado por el Instituto Médico Forense de Toledo. Según dijo, “tiene una escasa madurez respecto a su edad biológica”, lo que supone “otro factor a tener en cuenta” a la hora de valorar su culpabilidad. De esta manera, “habría que considerarlo como menor de edad”, indicó
Hechos graves
Por su lado, la acusación particular, ejercida por Dolores Valdeolivas, eleva su petición de prisión a 20 años y pide una indemnización de 12.000 euros, al considerar los hechos “muy graves”. En declaraciones a los medios, se mostró convencida que el procesado cometió presuntamente cuatro delitos de abusos sexuales “no consentidos”, como así lo acreditan, según dijo, diferentes pruebas periciales.
Además, la letrada respaldó la versión de la adolescente que “ha mantenido la incriminación en todo momento, con una declaración verosímil, sin variar su versión y sin incurrir en contracciones”.
Insistió en que las relaciones “nunca fueron consentidas” y se llegaron a consumar “por la prevalencia de superioridad de un chico de 18 años” sobre una niña de 12 años, que como tal no valoró “la transcendencia de los hechos”.
El fiscal, de su lado, pide un total de 18 años de cárcel y la prohibición de aproximarse a menos de 300 metros para el joven acusado, y una indemnización de 6.000 euros para resarcir a la joven. Lo acusa de cuatro delitos de violación, aunque aplica la atenuante de “anomalía o alteración psíquica” porque en el momento de cometer los hechos “tenía un pensamiento empobrecido y lento, con una importante inmadurez mental”
Seguirá este miércoles
La primera sesión del juicio, que concluirá este miércoles, se cerró con las declaraciones como testigos de familiares y dos amigos del chico y una amiga de la víctima. En la segunda jornada se presentarán las pruebas periciales y se leerán las conclusiones por los representantes de cada parte.