La Sección Primera de la Audiencia de Ciudad Real ha comenzado a juzgar este martes a Francisco Manuel, conocido como el “Veneno”, un hombre acusado de un delito de tentativa de homicidio cometido la noche del 19 de marzo de 2016 en Puertollano. Tras las declaraciones del presunto agresor y de la víctima, de una testigo que se encontraba en el lugar de los hechos, de varios agentes de Policía que instruyeron el caso y de las dos médicos que atendieron a la víctima, el juicio se ha suspendido hasta el próximo jueves, 14 de marzo, día en el que declarará Rubén, uno de los testigos.
El presunto agresor, Francisco Manuel, ha asegurado, a preguntas del Ministerio Fiscal, que había pasado todo el día de hechos en el bar Cruz y Raya jugando a las caras y bebiendo. Ha añadido que a última hora del día apareció por el bar la víctima, Juan Carlos, que, al parecer, se enzarzó con otros en una pelea. “Yo fui a separarlos y él se metió conmigo”, ha añadido.
A las 23,00 horas
Según su testimonio, estos hechos ocurrieron sobre las 23,00 horas. Una patrulla de Policía llegó al bar “y me preguntaron si quería denunciar los hechos y yo dije que no”.
Siempre según su testimonio, ha añadido que se fue a su casa en compañía de su amigo Rubén, donde “me bebí otro litro (cerveza) y me fumé un par de canutillos”, unos hechos que, según puso de manifiesto el Ministerio Fiscal, no están recogidos en su primera declaración.
Él apareció en su casa con un hacha
“Juan Carlos apareció en mi casa como dos horas después de la pelea, sobre la una de la madrugada. Yo sentí golpes en la puerta y que él me decía que abriera que me iba a matar. Empecé a pedir a los vecinos que llamaran a la policía. Abrí la puerta y se me abalanzó con un hacha dentro de mi casa, intentó golpearme pero no me dio. No sé, sentí miedo, me quedé en blanco, me enganchó del cuello”, ha añadido en su declaración.
A preguntas del fiscal, ha negado que el hacha estuviera en su casa “sino que la traía Juan Carlos en la mano”. Ha insistido varias veces en que tenía miedo “y no me acuerdo de casi nada”. “No estoy seguro de haberle dado, a lo mejor fue en el forcejeo”, ha insistido para añadir, posteriormente, que las heridas que presentaba Juan Carlos “no las hace un hacha”.
La víctima le dijo que estaba bien
Ha asegurado que, “tras el forcejeo”, al ver “que sangraba mucho pensé que era grave, pero no se caía ni nada. Le dije que me había arruinado la vida y él contestó ‘que no Veneno, que estoy bien’, me dio un abrazo y se fue”. Igualmente, a preguntas del fiscal, ha negado que viera como se tambaleaba por la calle o que chocara con una señal de tráfico.
Igualmente, ha explicado que pidió a los vecinos que llamaran a la policía porque él no tenía saldo en el movil “y no sabía que se podía llamar sin saldo”.
En cuanto a la pelea previa en el bar, le ha quitado importancia asegurando, de nuevo, que no se acuerda y que fue Juan Carlos el que le dijo “vente pa fuera”.
El abogado del presunto agresor, durante el interrogatorio, ha querido dejar claro que es consumidor habitual de alcohol y drogas y que el hacha no estaba en casa de Francisco Manuel sino que la traía Juan Carlos.
Testimonio de la víctima
Por su parte, la víctima, Juan Carlos, vecino de patio del presunto agresor, ha asegurado que llegó por la tarde al bar Cruz y Raya donde se produjo un incidente entre uno de sus amigos y Francisco Manuel “y yo intervine para separarlos”. Ha afirmado que no se acuerda de a qué hora se produjo la pelea, que él no vio llegar a la Policía y ha negado, incluso, que se insultaran o se produjeran amenazas de muerte.
“Me dio con lo que sea”
“A la media hora de la pelea decidí ir a su casa para ver qué había pasado en el bar. Yo no llevé nada, llamé dos o tres veces con la mano en la puerta y tardó un poco en salir. Yo no oí que pidiera a los vecinos que llamaran a la policía, abrió la puerta y me dijo ‘ya vienen a mi casa a matarme’, y me dio con lo que sea, con el hacha sería pero yo no vi nada; no sabía si me había dado con un martillo, con un hacha o con una motosierra”, ha explicado.
“Cuatro hachazos me dio; yo no me abracé a él pidiendo perdón ni nada”, ha insistido. “Con la cabeza abierta ya no me acuerdo de nada”.
Una joven, testigo
También ha declarado una joven, Ana, que la noche de autos se encontraba paseando a su perro en las inmediaciones de donde tuvieron lugar los hechos. En su declaración ha asegurado que escuchó fuertes golpes en la puerta y voces de alguien pidiendo que se llamara a la policía, aspecto éste último que no está recogido en su declaración inicial. “Después, desde la lejanía, ví dos cuerpos tumbados en la calle y al momento, vi subir a Juan Carlos tambaleándose hasta que llegó a su casa y oi decir a su mujer ‘lo vamos a denunciar’. Después vi gotas de sangre por toda la calle”, ha explicado.
Primera patrulla de policía
También han declarado los dos agentes que se desplazaron hasta la vivienda de la víctima, Juan Carlos, tras recibir un aviso a las 23,12 horas. “Cuando llegamos a su casa estaba aturdido, con heridas sangrantes en la parque izquierda de la cabeza. Nos explica que ha discutido con una persona que le ha agredido con un hacha. Hace una descripción del agresor, comenta que le conocen por Veneno y da explicaciones de como iba vestido”, entre otros.
Estos agentes pasan aviso a otra unidad mientras esperan que llegue una Uvi movil que traslade hasta el hospital a Juan Carlos.
Segunda patrulla de policía
Una segunda patrulla de policía es avisada para localizar al presunto agresor que, con las explicaciones dadas por la víctima, saben perfectamente quien es. En su declaración han asegurado que llegan a su casa, tarda en abrirles la puerta, y cuando lo hace les explica que un vecino ha ido a agredirle con un hacha, que se la había quitado y que le había agredido él pero que ya estaba todo arreglado. “Entonces intervenimos el arma y lo detenemos”, añadió el agente.
Parte médico
Las dos médicos que atendieron a la víctima han recordado que sufrió un traumatismo craneo-encefálico con fractura y hundimiento de bóveda craneana en temporal izquierdo consistente en una herida inciso contusa de seis centímetros en la región parietal izquierda y una herida paralela a la anterior de unos cuatro centímetros en región ciliar izquierda y dos más inciso-contusas en el parietal izquierda de tres centímetros de longitud.
“Sin un tratamiento adecuado son heridas que podrían haber llevado a la muerte”, han explicado las médicos quienes han recordado que la víctima tuvo que ser intervenida quirúrgicamente para drenar un hematoma, retirar fragmentos óseos y deshacer unas burbujas de aire acumuladas en el cerebro.
Piden una pena de siete años
La Fiscalía pide siete años de cárcel para Francisco Manuel acusado de un delito de tentativa de homicidio y una indemnización de 19.325 euros por las lesiones causadas y 119.928 euros por las secuelas.
Según el escrito del Ministerio Fiscal, el herido tuvo que ser intervenido quirúrgicamente y necesitó un total de 325 días para su estabilización, quedándole como secuelas la pérdida de sustancia ósea que necesitó de una craneoplastia, daño neuropsicológico en grado moderado y un perjuicio estético ligero constituido por las cicatrices en cuero cabelludo no visibles y el área de hundimiento.
El juicio se retomará el próximo jueves.