J. Y. / Ciudad Real
El aeropuerto de Ciudad Real será subastado el próximo 19 de junio, tras haberse agotado las numerosas fases de venta directa abiertas desde hace más de dos años (con precios mínimos de compra de 100, 90 y 80 millones de euros), sin que se haya cerrado ninguna operación de compra de la infraestructura, que se ofertaba de manera unitaria.
Así lo ordena una providencia emitida el 10 de abril por el Juzgado número 4 de Instrucción y de lo Mercantil de Ciudad Real, por la que se modifica la configuración de venta de la explotación en varias unidades (aeroportuaria e inmobiliaria) y valora el complejo en 40 millones de euros, la mitad del precio mínimo fijado en la anterior fase, que todavía no han cerrado los tres administradores concursales.
La subasta se celebrará de forma presencial en la sede del juzgado el día señalado y, por primera vez, podrán concurrir las administraciones públicas, para las que los gestores no marcan la condición indispensable de aportar el 5% de la tasación (dos millones de euros) previsto para cualquier otro postor, al suponerles solvencia.
Según el dictamen de la juez, los licitadores deberán depositar antes de las 15 horas del 18 de junio dos millones de euros como depósito de garantía, sin el que no se admitirán propuestas de compra.
Los bienes por los que se podrá pujar valorados en 40 millones son los equipamientos, terrenos e inmuebles enmarcados en la unidad productiva especializada de tipo aeronáutico (terminal, pista de aterrizaje, parking, pasarela de comunicación, edificios, instalaciones, plataforma de rodadura, hangares o torre de control), mientras que dejan fuera la segunda unidad correspondiente a las fincas anexas a la infraestructura donde, según recogía la Declaración de Impacto Ambiental del proyecto, fue declarada la Zona Especial de Protección de Aves (ZEPA).
De acuerdo con lo establecido en el plan de liquidación, la subasta se realizará sin sujeción a precio mínimo de salida y se admitirán todo tipo de posturas, aunque se aprobará “el remate a favor de la mejor postura, cualquiera que sea su importe”.
Los administradores recuerdan a los potenciales inversores que no se admitirán reclamaciones sobre el estado de las instalaciones, dado que “los bienes e instalaciones que se subastan ya han sido utilizados y se enajenan en el estado físico, jurídico y aeronáutico en que se encuentran”.
Establece varias fórmulas de pago, dependiendo de la cantidad que se oferte y que sea admitida. Solo se admitirá el pago a plazos si se ofrece un precio superior a 40 millones y se aporta compromiso en firme de entidad bancaria o de seguros de garantizar el pago de las cantidades aplazadas. Así, se tendrán que entregar 20 millones en los 40 días hábiles siguientes a la fecha de aprobación del remate, mientras que el resto del precio ofrecido, habrá de hacerse efectivo en el plazo de un año desde la celebración de la subasta.
Si la oferta de pagar a plazos la formulara una administración pública, no se le exigirán garantías específicas para asegurar el aplazamiento, en atención a la presunción de solvencia que las ampara, y el plazo de pago del resto del precio adicional a los veinte millones de euros podrá ser superior al año siempre que la Administración Concursal así lo admita.
En el caso de que la mejor postura fuera igual o superior al 70% del valor de la unida que se subasta y con oferta de pago al contado, se aprobará esta oferta y el rematante deberá consignar la diferencia en el plazo de 40 días hábiles.
Si sólo se presentaran propuestas de compra superiores al 70% tendrán 40 días para consignar la cantidad de 20 millones de euros y para que se aporten las garantías efectivas del aplazamiento (si no se hubieran aportado antes), aunque el resto del precio deberá hacerse efectivo a lo largo de un año.
Venta directa
Sin embargo, y aunque la decisión de subastar el aeropuerto se produce al no haber registrado “ofertas admisibles de compra de la explotación unitaria de la concursada por el procedimiento de venta directa de la misma”, este proceso sigue abierto, según la providencia. En concreto, fija un plazo para presentar ofertas “de la unidad productiva mixta” por un mínimo de 80 millones, mientras que no se esté tramitando otro sistema de enajenación, por lo que los interesados podrán presentar su proyecto hasta las 15 horas del 29 de mayo, con la obligación de presentar el aval económico de cuatro millones de euros.
El aeropuerto Central, el primero en España de gestión privada, se ideó a mediados de la década de los años 90 y tras su entrada en funcionamiento en diciembre de 2008, fue declarado en concurso de acreedores en 2010, aunque siguió funcionando hasta agosto de 2012.