Un año más la ciudadanía de Brazatortas se beneficia de una nueva rebaja en la ordenanza fiscal del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) de naturaleza urbana, dejándolo gravado para este ejercicio 2022 que hoy comienza en un 0,43%.
Decisión que responde a la sensibilidad municipal “con la situación de crisis económica que todos conocemos y que afecta a nivel nacional e internacional y por supuesto a nuestro municipio, con incidencia en la mayoría de los hogares”, según explica en nota de prensa el alcalde de la localidad, Pablo Toledano.
Toledano considera que “vivir en un municipio rural tiene que ser con impuestos bajos y que eso sea un atractivo dentro de nuestra estrategia de lucha contra el despoblamiento”.
Es por tanto el sexto año consecutivo de rebaja que aplica el Consistorio torteño a propietarios de propiedades urbanas, en una progresión “que nos gustaría alcanzar esta legislatura del mínimo que se nos permite, el 0,40%”, recalca el regidor.
En 2016 el porcentaje impositivo de contribución urbana era del 0,52 y al año siguiente se rebajó al 0,50%; en 2018 fue del 0,48%; en 2019, el 0,47%; en 2020 fue del 0,46%; y este año estaba en el 0,44%, manteniéndose como el más ventajoso en toda la comarca.
Además, en cuanto al IBI de rústica, Brazatortas ofrece también un tipo impositivo interesante, que en algunos casos llegar a ser la mitad del que está fijado por otros municipios de su entorno comarcal.
En la preocupación social del equipo de Gobierno y de la Corporación municipal en Pleno, dado que el apoyo fue unánime al refrendarlo también la oposición, cabe destacar además la congelación de todas las tasas municipales. Tal es el caso del comedor social.
Únicamente el Consistorio torteño se ha visto en la obligación de actualizar según el IPC para este año previsto el pasado mes de octubre, conforme a los contratos de concesión suscritos con concesionarias externas, los servicios de recogida de basuras y del agua.
Se trata de una revisión de en torno al 3%, que se da traslado a los usuarios finales también con el fin de mantener el equilibrio presupuestario ante, por ejemplo, la subida de sueldo de los funcionarios establecido por el Gobierno de España.
