Mercedes Camacho
Ciudad Real
La gestión educativa de los cuatro últimos años por parte del Gobierno que presidía María Dolores de Cospedal le han pasado factura al colegio de educación Infantil y Primaria Juan Alcaide, que ha pasado de tener 84 alumnos en el curso 2011-2012 a sólo 11 en el 2015-2016, de los que seis se marcharán el próximo curso, dos de ellos por cambio de etapa educativa ya que se pasan al instituto y cuatro más porque así lo han solicitado los padres por distintos motivos.
Y es que medidas adoptadas por la Consejería de Educación como el distrito único en 2013 o el cierre de la matriculación en educación infantil de tres años el mismo año, han provocado que este centro educativo se quede sin alumnos por falta de demanda.
Esta situación ha provocado que la Consejería de Educación, basándose en criterios puramente educativos y en informes técnicos, haya visto la conveniencia de efectuar un paréntesis en la actividad académica del centro, reiniciando la misma, si fuera necesario y hubiera demanda, más adelante.
Pérdida del 90%
La pérdida de alumnado durante la pasada legislatura ha sido cercana al 90%, de forma que en este curso sólo hay 11 estudiantes en el centro: uno en educación Infantil de 5 años y 10 en Primaria, de los que 2 están en 1º; 3 en 2º; 1 en 3º; 2 en 5º; y 2 en 6º.
En el curso 2011-2012 el número total de alumnos era de 84, de los que 26 niños estaban en Infantil y 58 en Primaria.
Sin embargo, el descenso más acusado se produjo justo al curso siguiente, en el comienzo de la anterior legislatura, cuando el colegio perdió 30 alumnos, quedándose con 36 en Primaria y 19 en Infantil.
A partir de ese momento el número de alumnos no dejó de descender, de forma que en el curso 2013-2014 perdió otros 30 estudiantes hasta quedarse con 24 -19 en Primaria y 5 en Infantil-, mientras que en el curso 2014-2015 había 17 alumnos -14 en Primaria y 3 en Infantil- hasta llegar a los 11 de este curso.
De esta forma, el próximo curso, sólo quedarían cinco alumnos en el centro porque dos de esos 11 estudiantes acaban el colegio, mientras que las familias de otros tres han solicitado poder ir a otros colegios. Asimismo, uno de los alumnos tiene la modalidad de escolarización combinada con el Centro de Educación Especial Puerta de Santa María y su familia ha pedido en este último centro la escolarización completa.
Sin desafección
Por lo que se refiere al uso del edificio, fuentes del Gobierno regional confirmaron a Lanza que de momento no se va a desafectar de su uso educativo precisamente por si la demanda hiciera necesario retomar la actividad educativa en este colegio.
Tras esta decisión basada en los informes de los técnicos, los mismos recomiendan distribuir de forma equilibrada a los cinco alumnos restantes en los centros docentes más próximos -hay que recordar que hay tres en las inmediaciones, concretamente el CEIP Dulcinea; el CEIP Ángel Andrade; y el CEIP Miguel de Cervantes- y suprimir los puestos escolares de la actual plantilla, al tiempo que indica que no procede suprimir el centro por si hiciera falta su uso en el futuro.
Sin profesorado definitivo
A la escasez de alumnos para estudiar en el colegio el próximo curso se suma el hecho de que también se queda sin profesorado definitivo debido a que se jubila su directora que es la única plaza cubierta de forma permanente.
Además, el centro sólo tiene en plantilla dos plazas de maestros a día de hoy, la citada de la directora y otra ocupada por un interino.