El fiscal jefe de Ciudad Real Luis Huete ha rebajado a siete años de cárcel los más de nueve que pedía para la supuesta cabecilla de la trama de la droga de Villanueva de los Infantes que cayó en la operación ‘Jarete’ de la Guardia Civil en 2016. Y lo mismo para el hijo que ha compartido banquillo con ella en el juicio ante la Audiencia Provincial.
Por el principio igualitario con el resto de acusados (la mayoría reconocieron su culpa el lunes pasado) el fiscal se basa en la poca cantidad de droga encontrada en poder de María Leida M.O. y su hijo Carlos Andrés para pedir dos años y tres meses por el delito tráfico de drogas para cada uno. Por el supuesto blanqueo del dinero mantiene los cuatro años y nueve meses iniciales, por lo que suman siete.
Para José Luis S.L., marido de la supuesta cabecilla, acusado de blanqueo de capitales no ha habido rebaja: cuatro años y nueve meses.
Los tres, incluidos la madre y el hijo con antecedentes por tráfico de drogas, han vuelto a mantener su inocencia al final del juicio que ha quedado visto para sentencia este lunes ante la sección primera de la Audiencia Provincial de Ciudad Real, y se lo han vuelto a decir al tribunal.
No conoce a la ‘mula’ detenida en Barajas con 6,7 kilos de cocaína
La más contundente ha sido María Leida, que ha declarado que no conoce de nada a la ‘mula’ detenida en Barajas con 6,7 kilos cocaína que supuestamente iban para el grupo, según los seguimientos de la Guardia Civil y uno de los números telefónicos encontrados en poder de esa detenida. “Yo conocí a esa señora en prisión, me dirigí a ella, le dije que por su culpa estaba yo allí, y ella me contesto que la droga no la traía para mí”, le ha explicado al tribunal en el uso de su derecho a la última palabra.
Los tres tenían su papel en la trama
El fiscal considera probado que los tres acusados tenían su papel en la trama a la que consideran responsable de haber introducido importantes cantidades de cocaína desde Colombia, en Villanueva de los Infantes y otras localidades del Campo de Montiel como Cózar y Santa Cruz de los Cáñamos.
Sostiene que tanto las escuchas, como los seguimientos de la Guardia Civil, y los datos objetivos, como la descripción física de sus empleadores que dieron las personas detenidas en Barajas con droga; como números de teléfono y contactos entre ellos, apuntan en la dirección de que tanto María Leida, como Carlos Andrés habían retomado el narcotráfico (tienen condenas anteriores por lo mismo) en el año 2016 en Infantes y utilizaban a personas con pocos recursos para hacer pequeños envíos de dinero a Colombia, con los que blanquear el dinero que conseguían por el narcotráfico sin levantar sospechas.
El testigo ni recuerda ni quiere recordar
La última sesión del juicio no ha dado para mucho más. El testigo protegido, la primera persona que supuestamente contó a la Guardia Civil quien era la principal acusada y a lo que se dedicaba, con números de teléfono, etc, ahora no recuerda nada, ni quiere recordar, según ha explicado el mismo al tribunal.
Compraba droga “a espontáneos”
El testigo, que ha declarado por videoconferencia, ha relatado que en esa época el era un adicto a la cocaína, pasó una temporada muy mala, de la que ha olvidado todo. Preguntado directamente sí compró droga a la familia de María Leida ha dicho que no, “compraba la droga a vendedores espontáneos”.
También ha declarado uno de los supuestos contratados para el ‘pitufeo’, un joven de Cózar que ha explicado que ese año hizo “dos o tres” envíos de dinero a Colombia por encargo de “un chaval muy simpático”, que según él no es ninguno de los acusados.