El consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, ha manifestado que “el queso manchego y el ovino manchego no serían lo que son hoy, sino fuera por el trabajo de AGRAMA”. Unas declaraciones que ha realizado en Albacete tras renovar el compromiso del Gobierno regional con la Asociación Nacional de Criadores de Ganado Ovino Selecto de Raza Manchega (AGRAMA) para la mejora de la raza de ovino autóctona, la oveja manchega y la investigación para la mejora de su producción de leche, a través de la cesión de la finca ‘La Nava del Conejo’, situada en Valdepeñas.
El consejero ha firmado con Antonio Martínez, presidente de AGRAMA, entidad oficialmente reconocida para la gestión y optimización del Libro Genealógico de la Raza Manchega y para la difusión del Esquema de Selección que se desarrolla conjuntamente con la Consejería, el segundo convenio (el primero se firmó en Expovicaman en 2011) con el objeto de que pueda disponer de una explotación donde desarrollar y gestionar la conservación y mejora de la raza con plena autonomía, aunque contando siempre con la colaboración de la Administración regional a través del Centro Regional de Selección y Reproducción Animal (CERSYRA) dependiente del IRIAF (Instituto Regional de Investigación Agroalimentaria y Forestal).
En este sentido, Martínez Arroyo ha señalado que es “un paso importante porque se pone a disposición del sector ganadero el patrimonio de la Administración”. Añadió que “es un compromiso del Gobierno regional con el sector que utiliza esa finca para mejorar la raza y para que cada vez sea más rentable vivir de la ganadería en esta tierra”.
Asimismo ha explicado que “en esta raza, el rendimiento lechero es capital, no se puede competir si no se produce más leche por oveja. Estamos hablando de un rendimiento medio de 215 litros por animal, son cifras muy buenas que se deben al esfuerzo que se ha hecho desde AGRAMA en las últimas décadas, con el apoyo del Gobierno regional”.
La finca
La finca “La Nava del Conejo” es propiedad de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, que traspasa a Agrama sus funciones y servicios de mantenimiento y gestión del rebaño manchego y de la base territorial que los sustenta.
Los trabajos para la ejecución del proyecto se realizarán en colaboración con el CERSYRA de Valdepeñas, dependiente del IRIAF.
Dicha finca se ubica en el mismo término municipal de Valdepeñas, situada a 15 kilómetros del casco urbano, disponiendo de 656 hectáreas, de las que 386 son de cultivo en secano, 217 de monte, 45 de erial y 8 improductivas.
En la misma se encuentran las correspondientes instalaciones necesarias para la gestión y cuidado del rebaño (naves, almiar, sala de ordeño).