La fusión comercial se ha firmado ante notario y supondrá sumar la producción de 2.300 oleicultores villarrubieros y bolañegos, que asciende a 3,2 millones de kilos de aceite de oliva para su venta conjunta en los mercados nacionales e internacionales. Según su presidente, Jesús Julián Casanova, empezará a operar en los próximos días con las existencias “molturadas y preparadas”, con el objetivo de facturar 9 millones de euros.
En principio, comercializarán el granel, que es el 80% de sus fondos, aunque tienen en marcha, según ha desvelado, otro proyecto interno para “sacar una marca conjunta”.
La cosecha media entre ambas cooperativas es de 15 millones de kilos de aceituna, aunque en la última, con una mejor campaña, han alcanzado los 17 millones de kilos de aceituna.
El también máximo representante de Vidasol -la cooperativa vinícola de segundo grado formada por tres cooperativas ciudarrealeñas y dos toledanas, “que funciona muy bien”- y de la cooperativa El Progreso, ha destacado la necesidad de “tener músculo y fortaleza” para obtener más beneficios para los productores.
Así, ha defendido la mejora de las estructuras comerciales para optimizar los canales de venta y para poder llegar más lejos de una manera “más eficiente y potente”, a través, según ha indicado, “de herramientas como los grupos de comercialización”.
En este caso, Vidasol “será positivo y fuente de riqueza” para la nueva entidad, pues “lo primero será sumar sinergias” con el grupo vinícola y aprovechar su estructura y su presencia en países y continentes como Francia, Estados Unidos, Asia o África
A partir de ahora “tendremos que trabajar mucho para vender mucho y mejor”.
Sobre la integración de otras entidades, Casanova ha indicado que “hay interés y nosotros estamos abiertos”, a la espera de recibir nuevas incorporaciones “para “tener más fortaleza y para llegar de manera más cómoda a los mercados”.
Más dotaciones de agua
El presidente de la Cooperativa Oleovinícola de Bolaños de Calatrava, Julián Castro, ha incidido en el objetivo del grupo para ampliar la rentabilidad de los agricultores, a la vez que ha reivindicado más dotaciones de agua, al menos de 4.000 metros cúbicos por hectárea, para tener una “agricultura digna”.
Las mayores concesiones contribuiría a que los más jóvenes apostaran por la actividad agrícola y sería una herramienta contra la despoblación. “Tenemos las más bajas dotaciones”, se ha quejado, así como ha solicitado que se trasvase el 20% del agua que se destina desde Castilla-La Mancha al Levante para así “apostar por el futuro de la tierra y los agricultores”.
Las ayudas públicas
El director general de Industrias Agroalimentarias y Cooperativas de la Consejería de Agricultura, Gregorio Jaime, ha celebrado que las estrategias del Gobierno regional en cuanto a la integración comercial “cristalicen”. PRecisamente, Oleovidabol aspira a poder beneficiarse de esta línea de subvenciones.
En este sentido, ha recordado los resultados de las convocatorias de ayudas para aquellos proyectos agroalimentarios con un cierto volumen de facturación, como ha sido el caso de cinco nuevas entidades asociativas prioritarias de interés regional (eapir) ya creadas, y seis agrupaciones de productores.
Jaime ha dicho que al final de la convocatoria actualmente abierta hasta el 2 de junio serán 16 las agrupaciones creadas, son la clave para fortaleza dimensión empresarial y musculatura para competir en los mercados globales.
Concentrar la oferta para mejorar los precios
Por su parte, el alcalde de Bolaños, Miguel Ángel Valverde, ha celebrado que la mejora en la distribución de los alimentos y la concentración de la oferta en los mercados, lleve a alcanzar “los mejores precios posibles” para el aceite, al igual que ocurre con otros productos como el vino, la berenjena o la cebolla.
Ha aplaudido que la localidad haya sido “testigo” de la constitución de la cooperativa de segundo grado “para el presente y el futuro de la industria agroalimentaria”.
Ha destacado el “momento importante” para los pueblos implicados en la operación, pues compensará “la falta de impulso” en la comercialización de unos productos agrícolas “de primera calidad”.
Valverde ha insistido en la necesidad de fortalecer las herramientas de venta en un sector económico tan potente para el conjunto de la comarca y de la región.
Contra la despoblación
Su homóloga en el Ayuntamiento de Villarrubia de los Ojos, Encarnación Medina, también ha visto “importante” la integración comercial de las cooperativas, por la mejora de la rentabilidad que traerá, así como ha vinculado el potencial del sector agrícola con la fijación de población en los entornos rurales.
Consejo rector
Integrarán el Consejo rector de este grupo: Jesús Julián Casanova, presidente; Julián Castro, vicepresidente; José Joaquín Moreno-Chocano, secretario; y los vocales Luis Millán, Francisco Florencio Alvarez, José Ruiz y Aniceto del Valle.
El Progreso de Villarrubia de los Ojos www.bodegaselprogreso.com nació en 1917, y sus 1.500 oleicultores producen una media anual de 8 millones de kilos de aceituna de las variedades Cornicabra, Picual y Arbequina, aunque esta campaña superó los nueve millones de kilos. Comercializa marcas como Olirrubia, Medianiles (ecológicos) y Cosecha Temprana.
Campo de Calatrava de Bolaños de Calatrava www.oleovinicolacampodecalatrava.es se fundó en 2003, fruto de la unión de la Cooperativa Olivarera San Isidro Labrador (fundada en 1960) y la Cooperativa Vinícola Bolañega (fundada en 1980). Con unos 750 oleicultores, produce una media de 6 millones de kilos de aceituna de las variedades Picula, Cornicabra y Arbequina, aunque esta campaña superó los 8 millones de kilos. Comercializa la marca Torreprieta.