El portavoz de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Ciudad Real, Pedro Fernández, ha pedido este martes la dimisión de su compañero de grupo municipal, Francisco Fernández-Bravo, por “vago”.
Además, en rueda de prensa, le ha lanzado un últimatum y le ha concedido de plazo para tomar una decisión hasta este viernes, 21 de abril ya que, si no se marcha, ha dicho que será él quien deje C’s y pase a ser concejal no adscrito.
Fernández ha explicado que es la tercera vez que pide la dimisión de Fernández-Bravo, si bien las dos anteriores se produjeron en el ámbito de reuniones internas de su partido, la última incluso con representantes de Ciudadanos nacional “que me dijeron que a lo mejor la culpa era mía por operarme”.
Y es que Fernández ha asegurado que, durante su convalecencia, su compañero de grupo municipal -que también es subdelegado provincial de Ciudadanos- no acudió “absolutamente a nada” del Ayuntamiento, “mostrando así su desidia con el proyecto de Ciudadanos y su ausencia de compromiso con los vecinos de Ciudad Real”.
El portavoz de Ciudadanos ha aseverado que esta decisión responde a su deseo de que “Ciudad Real tenga a sus 25 concejales trabajando por la ciudad” ya que, ha agregado, “no ha desarrollado las labores propias del cargo, y ello a pesar de contar con una liberación parcial del Ayuntamiento de Ciudad Real” -el conocido como cuartillo ya que la liberación completa la tiene Pedro Fernández-.
En este sentido, ha calculado que de las 600 reuniones que se pueden haber producido a lo largo de esta legislatura en el Ayuntamiento de Ciudad Real, Fernández-Bravo habrá asistido “como mucho, a 35 de ellas, contando los plenos y pese a que está cobrando un sueldo del Ayuntamiento”.
“Obligar” a trabajar
Por el contrario, ha añadido, al abandonar él Ciudadanos si su compañero no dimite, pretende obligar a Fernández-Bravo a que asista a todas las reuniones del Ayuntamiento de Ciudad Real al ser el único concejal de la formación naranja.
“Así trabajará por la capital, que es lo que merecen los ciudadanos que nos votaron. Por lo menos que el dinero que cobre del erario público, el de todos nuestros vecinos, que se lo merezca aunque sea un poquito”.
Cuestionado sobre las consecuencias de abandonar su partido ha indicado que “no puedo seguir a cualquier precio” por lo que ha instado a Ciudadanos a que ponga en marcha una comisión “neutral” que determine “quién ha podido trabajar más por el proyecto de Ciudadanos”.
Finalmente, y en el caso de que acabe siendo concejal no adscrito, Pedro Fernández ha dicho ser consciente de que perderá la liberación total que tiene en el Ayuntamiento de Ciudad Real -ya que esta pertenece a Ciudadanos- y se ha comprometido a renunciar a cualquier remuneración salvo la de asistencia a plenos y comisiones.
PP: “Sus ausencias están en las actas”
El portavoz del PP en el Ayuntamiento de Ciudad Real, Miguel Ángel Rodríguez, ha dicho estar preocupado “ante unas acusaciones tan graves” como las realizadas Fernández sobre su compañero en el Grupo Municipal de Ciudadanos, por lo que estimó que sería necesaria una “aclaración”.
Aunque se trate de “un tema interno”, Rodríguez ha mostrado su preocupación “por la falta de trabajo de un concejal” y recordó que el PP ya había denunciado en algún Pleno que Fernández-Bravo estaba más preocupado por otras cosas que por ser concejal del Ayuntamiento de Ciudad Real”.
Asimismo, y cuestionado sobre si el Grupo Municipal Popular había detectado esas “ausencias” del concejal de Ciudadanos, destacó que “se pueden ver incluso en las actas de los órganos de los que forma parte”.
No obstante, Rodríguez ha destacado que la crisis de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Ciudad Real no es un hecho aislado sino que “desmuestra que Ciudadanos se está desinflando en Castilla-La Mancha pese a las grandes expectativas con las que nació”.
Por el contrario, ha concluido, “desde el PP vamos a seguir trabajando para que los ciudadanos se sientan representados por el único grupo que les atiende y les escucha”.
Fernández-Bravo no dimitirá
Por su parte, el concejal de Ciudadanos Francisco Javier Fernández-Bravo ha asegurado a Lanza no tiene intención de dimitir como edil, si bien ha eludido pronunciarse sobre las acusaciones que ha vertido sobre él quien es aún el portavoz del Grupo Municipal de Ciudadanos, Pedro Fernández.
Precisamente la decisión de Fernández Aránguez se produce una mes antes de que se produzca el cambio en la portavocía de Ciudadanos, a mitad de mandato, como ambos concejales habían pactado al inicio de la legislatura.
Ciudadanos C-LM abrirá una investigación
El delegado territorial de Ciudadanos en Castilla-La Mancha, Alejandro Ruiz, ha considerado “irregular en muchos aspectos” que el portavoz de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Ciudad Real, Pedro Fernández Aránguez, haya pedido este martes la dimisión de su compañero de grupo municipal, Francisco Javier Fernández-Bravo, al que ha calificado como “vago”.
En este sentido, Ruiz ha anunciado que el Comité de Garantías del partido investigará la reacción de Aránguez, a quien se pedirá una “aclaración”.
En declaraciones a Europa Press, Alejandro Ruiz ha aseverado que considera “irregular” tanto la propia petición de dimisión de un compañero como las formas en que se ha realizado, “con palabras muy gruesas”.
Así, ha señalado que las declaraciones de Aránguez “no son maneras de actuar en un partido que ha venido a cambiar la política y a reflejar una imagen seria, pero no a dar estos espectáculos en la capital”.
Ruiz ha anunciado que la formación naranja realizará una investigación en el seno del órgano competente, el Comité de Garantías, donde se estudiarán los hechos y se pedirá “una aclaración”. En este sentido ha apuntado que las manifestaciones de Pedro Fernández dejan abierta la puerta “a cualquier tipo de reacción”.
Respecto al trabajo de Fernández-Bravo en el Grupo Municipal, el dirigente regional de Ciudadanos ha subrayado que goza de su confianza, y que le consta que “trabaja, acude a todos los actos y está siempre donde tiene que estar”, al tiempo que ha advertido a Pedro Fernández de que tiene un contrato privado firmado con la formación naranja que le obliga a dejar el acta de concejal si abandona el partido.
