Cuando está a punto de cumplirse un año de la toma de posesión del nuevo equipo de Gobierno del PSOE, el próximo día 27, los diputados del PP han abandonado este viernes el Pleno de la Diputación en señal de protesta por la respuesta dada a una de las cuestiones planteadas en el tema de ruegos y preguntas, asegurando que “no va a consentir ningún insulto”.
En una rueda de prensa posterior al Pleno, en la que, en principio, se iba a hacer balance de este primer año de gestión, el Portavoz del PP, Antonio Lucas-Torres, repetía ese planteamiento, a la vez que recordaba que el PP siempre ha estado por la colaboración con el equipo de Gobierno en beneficio de los pueblos de la provincia, lo que le ha llevado a aprobar el 90 por ciento de las cuestiones presentadas.
En este punto, prácticamente cuando ya estaba acabando la sesión, el diputado del PP Diego Ortega, cuestionaba el cumplimiento de plazos y la publicidad dada a las convocatorias en temas de deporte y cultura.
El responsable del área de Cultura en el equipo de Gobierno, David Triguero, negaba la mayor y acusaba al diputado “popular” de “no se ajustaba a la verdad” o de “mentir”, dado que, a su juicio, la oposición sí tenía toda la información que era necesaria.
Las palabras de Triguero provocaban la reacción de los diputados del PP, que se levantaban poco a poco, entre gritos que apelaban a “no aguantar insultos” y al cumplimiento de la Constitución.
El portavoz del PP, Antonio Lucas-Torres, se dirigía en parecidos términos al presidente de la institución, José Manuel Caballero, y al responsable de Cultura, David Triguero.
Caballero, en medio de la trifulca, apelaba a la serenidad y a respetar a la institución, mientras los representantes del PP abandonaban el Salón de Plenos.
El Pleno había transcurrido con normalidad, con todos los puntos aprobados con normalidad, salvo en el referido al estudio sobre el Plan de Financiación Sostenible del año 2015.
El viceportavoz del PP, David Marín, había criticado que el informe recogía que no se invertía todo el presupuesto y que la Diputación estaba obligada por el Ministerio de Hacienda a realizaba ajuste en el plan de financiación porque se había superado el techo de gasto.
Marín achacaba el no cumplimiento del recho de gasto por el dinero destinado a la financiación del diario público Lanza, mientras que la vicepresidenta de Economía y Hacienda, Lydia Molina, respondía que lo grave es que la Diputación, con unos ingresos de 107 millones, “sin deberle nada a nadie”, dijo, solo pueda gastar 82 millones por las normas del ministerio.
Por su parte, el presidente de la Diputación, José Manuel Caballero, aseguraba que, como medio público, el diario Lanza va a seguir recibiendo financiación, como ocurre con otros medios locales en ayuntamientos del PP, o como la televisión regional o Televisión Española, cada uno proporcionalmente.
Otra cuestión, ha señalado Caballero, es que se abriera un debate sobre la necesidad de que existan o no medios públicos, algo que, ha indicado, serían bien recibido por la empresas privadas del sector, dando a entender que el fondo del debate puede estar una cuestión de intereses económicos.
