El Partido Socialista de la provincia de Ciudad Real ha valorado positivamente que Castilla-La Mancha haya pasado en materia de dependencia “del suspenso de la época de Cospedal al notable alto de García-Page”, según el Dictamen del Observatorio de la Dependencia.
Así lo ha indicado el diputado regional en las Cortes de Castilla-La Mancha, Pablo Camacho, quien ha señalado que, según este dictamen, la región ha obtenido una puntuación de 8,6, por lo que coloca a la comunidad autónoma gobernada por el socialista Emiliano García-Page como la segunda con mejor nota de todo el país.
Camacho se ha congratulado de que Castilla-La Mancha haya pasado del 4,6, que se dio de nota cuando la región era gobernada por el PP de María Dolores de Cospedal, al 8,6 actual. Un incremento que, según el diputado regional, ha sido posible gracias a la apuesta del Gobierno socialista por las políticas sociales.
La región ha vuelto a registrar, por cuarto año consecutivo, un crecimiento de las personas atendidas del 7,51% respecto al ejercicio precedente. En los últimos cuatro años ha crecido más del 57%, situándose como la segunda con mejor ratio de personas potencialmente dependientes atendidas, a lo que hay que sumar los más de 16.000 puestos de empleo que existen gracias al Sistema de Dependencia, de los que 6.000 se han dado a lo largo de los últimos cuatro años.
Finalmente, Camacho ha comentado que “no ha sido fácil llegar hasta aquí” debido al “estado calamitoso en el que Cospedal dejó el Sistema de Dependencia”. A pesar de ello, Castilla-La Mancha ha logrado colocarse como la segunda mejor del país, solo con Castilla y León por delante. Todo ello, habiendo dejado de percibir Castilla-La Mancha del Estado alrededor de 26 millones de euros. Una cuantía con la que se podrían haber atendido a 4.300 personas dependientes y generado 1.015 nuevos empleos.