El Hospital Virgen de Altagracia de Manzanares, dependiente del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha, acogió ayer un curso para concienciar e implicar a los profesionales de la Medicina y de la Enfermería que trabajan en los servicios de urgencias y emergencias en los procesos de donación de órganos y tejidos. El curso, denominado ‘Actuación en urgencias en la donación de órganos y tejidos’, ya se había celebrado con anterioridad en los centros sanitarios de referencia provinciales de la Comunidad Autónoma, pero es la primera vez en que se imparte en un hospital de ámbito comarcal en el que no se practican extracciones de órganos.
El objetivo de esta iniciativa es, por tanto, concienciar e implicar al personal de Urgencias de estos centros asistenciales en el proceso de donación de órganos porque ellos son los primeros en atender a los pacientes y los que pueden poner en marcha la maquinaria al localizar a un potencial donante.
C-LM logró superar el año pasado la barrera de los 40 donantes por millones de población, en concreto alcanzó 40,2, un máximo histórico. En 2001 el número de donaciones era de 12,8 por millón de habitantes, 21 puntos por debajo de la media nacional.