J. Yébenes
Ciudad Real
Es una experta en cuidados de piel, por lo que difunde los consejos para proteger “el órgano más grande y más importante de nuestro cuerpo”. Como divulgadora en los medios, la doctora sevillana Carmen Torrejón ofrece en esta época una serie de recomendaciones para no agredir gratuitamente a la piel, coincidiendo con la ola de calor en España. Torrejón, directora de medicinaesteticaparatodos, advierte de los efectos negativos a la población por los riesgos de la exposición prolongada tan típica de esta época estival
PREGUNTA.- ¿Cuáles son esos efectos perjudiciales de la radiación solar en estos días de muchas horas de sol?. Cómo inciden en la superficie corporal?.
RESPUESTA.- Hay dos tipos de efectos por las altas temperaturas a las que estamos sometidos. Hay unas consecuencias generales de tipo anímico con episodios de bajadas de tensión, sensación de cansancio, disminución del sistema de defensa, dolor de cabeza o pesadez en los ojos. También hay otros efectos de contacto como pueden ser las quemaduras solares de primer y segundo grado, la producción de eritemas (enrojecimiento de la piel), las manchas solares y, por un efecto acumulativo, se puede llegar a tener cáncer cutáneo. Pero el sol tomado de forma moderada es muy positivo y beneficiosos porque sintetiza vitaminas y da vitalidad y energía.
P.- Los expertos hablan de la memoria de la piel con el sol ¿En qué consiste?
R.- El sol reverbera en nuestra piel y la capa de ozono filtra la radiación solar, pero si esta protección es menor pues se expone de forma más intensa en la piel con los rayos ultravioleta (UVA y UVB). Sino está bien protegida y con el paso de los años, es como una CPU que almacena los efectos de las exposiciones y llega un momento que se satura. Las secuelas se manifiestan con signos visibles como las manchas seniles o a veces con picores. La piel es cariñosísima y nos manda avisos para que estemos atentos y nos observemos. La piel en general y en particular la de la cara, el cuello y las manos están expuestos a múltiples factores que las van deteriorando más que el resto de la piel corporal y puede producirse el fotoenvejecimiento.
P.- Usted defiende la prevención como mejor herramienta para proteger la piel y para no sufrir lesiones por el abuso del sol. ¿Qué aconseja?
R.- Primero, hay que tener muy presente que no se puede tomar el sol en las horas en que los rayos se proyectan de forma más directa, es decir, entre las 12 y las 17 horas. Segundo, es fundamental la protección solar a tenor de las características genéticas de cada uno. No obstante, los médicos recomendamos protectores de no menos de 30 FPS (factor de protección solar) y para las pieles muy claras, al menos de 50. Sobre la forma de protegerse, hay que ponerse una capa muy generosa en casa, antes de ir a la playa o salir a la calle. Posteriormente, hay que repetir la operación cada dos horas porque las cremas no son tan resistentes al agua como indican en sus prospectos. Los expertos aconsejamos comprarla en farmacias
P.- ¿Hay diferencia entre sexos en función de los efectos perniciosos en la piel del sol?
R.- No, se da indistintamente en hombres y mujeres. Lo único que cambia es la parte del cuerpo. En mujeres, las zonas expuestas más directamente al sol son la cara, el escote y los brazos; y en hombres son la calva, la cara y las manos. Aunque en el imaginario colectivo parezca que la mujer esté más afectada porque se cuida más y toma más el sol, el varón también ha interiorizado el concepto de cuidado y está más extendido en sus hábitos.
P.- Pero el sol tiene efectos positivos, ¿no?
R.- Por supuesto. Como le he dicho antes, el sol es beneficioso para las personas. Es como el vino, tomado moderadamente es saludable, pero si abusamos, será perjudicial. La exposición al sol hay que dosificarla y racionalizarla y, de esta manera, se controlarán sus consecuencias en la piel. Es fuente de energía, rejuvenece, sintetiza y produce la vitamina D y nos ayuda a absorber el calcio.
P.- En España, ¿hay cultura de protección solar? ¿Qué casos más frecuentes ve usted?
R.- La piel es el papel de regalo que envuelve nuestro cuerpo, una razón por la que debemos cuidarla. Es frecuente que se apliquen mal las cremas solares y que se abuse de la exposición al sol en un país en el que existe poca cultura de la protección solar. No obstante, cada vez hay más concienciación y eso se está notando en los últimos años. Hay que tener en cuenta que la peligrosidad de las radiaciones están relacionadas con la época y con la perpendicularidad de los rayos del sol. Sobre los pacientes que veo, no soy dermatóloga, dirijo un centro de estética, aunque veo cuadros de envejecimiento cutáneo con frecuencia.
