Dos grupos de Pedro Muñoz y Huerta de Valdecarábanos (Toledo) introducen la temática regional en un desfile en el que América del Sur inspiró buena parte de las fantasías
Belén Rodríguez
Ciudad Real
En el oceano de plumas, de inspiración americana sobre todo del Sur, con fantasías ambientadas en las tribus prehispánicas o leyendas como la del Dorado, en el que se convirtió el gran desfile de Carnaval de este Domingo de Piñata (Oriente tuvo su cupo de protagonismo, pero menos), dos peñas modestas pusieron la originalidad y reivindicaron el terruño.
Por Ciudad Real lo hizo la asociación cultural La Corchea, de Pedro Muñoz, que casi al final del certamen, pasadas las tres y media de la tarde, se plantaron en las calles de la capital santificando y repartiendo el caldo regional como parte de su espectáculo ‘Este dios vino a brindar con nuestro vino’. Los pedroteños brindaron y dieron a probar buenos blancos y tintos de la comarca, y pusieron a desfilar a unas hermosas cepas a punto de vendimia. Además lo hicieron con mucho humor, algo que se agradece entre tanta espectacularidad circense.
Con ‘Denominación de origen’, la asociación Arco Iris de Huerta de Valdecarábanos (Toledo)también puso a desfilar a sus cuarenta y cinco componentes como si de cepas y viñedos se tratara.
No faltaron los homenajes a los carnavales más importantes del mundo: Brasil, Venecia y Santa Cruz de Tenerife; la fantasía y el mundo de los sueños (Peter Pan, la ciudad Esmeralda y el Mago de Oz).
Tampoco los piratas (posmodernos) y el terror tuvo su cuota de protagonismo en el argumentario de dos peñas. Especialmente terrorífica fue la participación de la asociación Fray Gótica, cuyos componentes exhibieron guadañas, esqueletos y calaveras. Por el ambiente de Bollywood optó la resultona asociación cultural Mascarada de Corral de Calatrava.
Cuatro incidencias
Para congregar a unas 26.000 personas en las calles y a más de 3.000 desfilando entre las once de la mañana y las cinco de la tarde, este Domingo de Piñata se saldó con pocos incidentes. Las cuatro actuaciones de los puestos de socorro de Protección Civil fueron por un mareo y pequeños cortes, indisposiciones de los participantes en el concurso, que echan el resto para que otros disfruten del Carnaval.
Los cielos encapotados no restaron afluencia, sobre todo en el Torreón. Los premios se han entregado pasadas las seis de la tarde.