Varios minutos de aplausos, lágrimas y emoción contenida han presidido el homenaje al cabo mayor Francisco Castro, muerto por coronavirus la pasada madrugada en la clínica Quirón de Ciudad Real, donde llevaba más de un mes ingresado.
De 64 años de edad era uno de los agentes más veteranos de la plantilla ciudarrealeña, fundador de la Unidad Especial de Intervención (UEI) y formador de tiro, y muy querido por sus compañeros, tal y como han puesto de manifiesto en el emocionado recuerdo que han rendido en su memoria a las 20 horas de este domingo en la puerta de la Comandancia.
El acto se ha iniciado de manera puntual y ha estado encabezado por el comandante jefe de Personal y Apoyo, Félix Mateo Aparicio. Ha participado un piquete de guardias civiles -también de Tráfico-, y miembros de la Policía Nacional y Policía Local, que han querido unirse al reconocimiento para presentar sus respetos.
Todos los agentes han oído, uniformados y dispuestos en formación, el himno a los Caídos y el de la Guardia Civil a lo largo de unos minutos que han terminado con una gran ovación de aplausos ofrecida no sólo por los efectivos presentes, sino por decenas de vecinos de la zona, que se han sumado al tributo desde sus balcones, terrazas y azoteas.
A continuación, el tercer jefe de la Comandancia ha entregado un ramo de flores a la viuda de Castro, que ha asistido al acto acompañada por sus hijos y otros familiares. Han vuelto a resonar las palmas durante un largo rato desde todos los rincones, incluso se ha odio un ‘Viva España’, en un escenario de seriedad y recuerdo.
Tras la parada de homenaje, los efectivos han abandonado poco a poco la zona con un sentimiento de dolor y recuerdo a quien fue un gran ejemplo de adiestramiento en el cuerpo, además de las numerosas condecoraciones de las que fue merecedor durante sus años de servicio.
Castro no ha podido superar la infección por la Covid-19 tras un largo ingreso hospitalario, y se convierte en el segundo agente que muere en la provincia a causa de la pandemia, el sexto a nivel nacional.
En los primeros días de expansión del virus falleció en Manzanares el agente Francisco Javier Collado, de 38 años y destinado en la prisión de Herrera de La Mancha.
El lamento por la pérdida de Castro ha sido recogido esta mañana en la rueda de prensa de miembros del Gobierno y mandos militares, como el jefe del Estado Mayor de la Guardia Civil, el general José Manuel Santiago, que ha lamentado la muerte del agente ciudarrealeño y ha trasladado el pésame a su familia. Igualmente, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, también ha raccionado en un mensaje de twitter. «Mando mis condolencias y un caluroso abrazo a su familia y amigos y a todos sus compañeros de la Comandancia de Ciudad Real. Descanse en paz», ha afirmado, según a recogido por Europa Press.