Marta Romero/ Alcázar de San Juan
La aprobación del justiprecio de las últimas tres viviendas que quedaban por expropiar del antiguo barrio de DBC##1Hermanos LagunaDBC##1, a pesar de haberse incluido como uno de los puntos del orden del día del pleno ordinario del mes de diciembre, pasó a tratarse de urgencia a petición del Grupo Municipal Socialista, que argumentó que se había convocado con poco tiempo y falta de documentación, lo que el edil socialista José Fernando Sánchez Bódalo calificó como “falta de cortesía” hacia los miembros de la oposición y cuestionó el “talante democrático” del equipo de gobierno.
A lo que el alcalde, Diego Ortega, respondió que “no iba a permitir” ese tipo de apreciaciones y explicó que los expedientes de las tres viviendas citadas habían sido entregados la misma mañana de la celebración de la sesión plenaria. Por este motivo entendió que estaba justificado el tratarlo como urgencia.
Además, concedió un receso de dos minutos para que estos expedientes pudieran ser revisados por los ediles del Grupo Municipal Socialista. La aprobación por unanimidad de esta urgencia posibilitará que se pueda proceder a la demolición de los bloques que quedan en pie en esta zona de la ciudad, que la empresa Gicacam ponga los terrenos a disposición del Ayuntamiento y puedan iniciarse las obras del nuevo recinto ferial.
Debate paralelo
Tras el receso, después que el PSOE comunicara su intención de votar a favor de la propuesta, “puesto que es algo que llevamos 30 meses esperando y que es bueno para Alcázar”, se desató un debate paralelo que enfrentó al edil socialista, José Fernando Sánchez Bódalo con el portavoz de CxA (UCIN) Ángel Montealegre. La causa, la mencionada crítica del edil socialista al “talante democrático” del equipo de gobierno y la “gestión” de este asunto que, a lo que también añadió que “ya está bien que acaben algún proyecto de los que les dejamos hechos”.
A este respecto mencionó también otros proyectos como el pabellón multiusos y la N-420. “Que si no hubiéramos dejado iniciados ustedes hubieran sido incapaces de sacarlos adelante”.
Ángel Montealegre comenzó su intervención dirigiéndose al alcalde diciendo que “no sé si es usted un alcalde democrático o antidemocrático, pero está mostrando mejor talante que el señor Bódalo cuando ocupaba su lugar, que no dejaba hablar a nadie cuando se salía del tema tratado en el orden del día”.
Dicho esto, criticó la gestión del anterior equipo de gobierno al respecto del pabellón multiusos, del que dijo se había hecho una “adjudicación ilegal” y habían dejado la obra en un “callejón sin salida” a nivel económico, financiero y judicial.
También apuntó que las obras de la N-420 se empezaron “sin disponer de financiación” y “obligando a los ciudadanos a regalar el suelo”. Terminó haciendo alusiones personales sobre Sánchez Bódalo, acusándole de “haber beneficiado a un familiar en la concesión de una ayuda”.
La Plataforma pide una disculpa pública
En el turno de ruegos y preguntas del pleno ordinario de diciembre, el portavoz de la Plataforma Contra la Privatización del Agua, Juan Garrido, leyó un escrito en el que pedía una disculpa pública del portavoz del equipo de gobierno, Ángel Puente, por insultos contra su persona y el ataque a su labor profesional como director de un colegio de la localidad. Garrido llevaba escrita su petición, según dijo, “para tratar de no ofender a nadie y explicar con claridad por qué solicitaba una disculpa pública del portavoz del equipo de gobierno”. El portavoz de la Plataforma Contra la Privatización del Agua consideraba que Puente, además de “insultarle a título personal”, había “puesto en entredicho su profesionalidad”, lo que argumentó que “está fuera del debate” y “nada tiene que ver con mi postura como ciudadano en defensa del agua pública”. La disculpa llegó por parte del alcalde, Diego Ortega, que dijo que “si se había sentido ofendido” o “se habían mal interpretado” las palabras del portavoz del gobierno municipal, pedía “perdón” públicamente. En ese momento, Puente, lejos de disculparse, cuestionó el “talante democrático” de la plataforma y calificó a Garrido como “lobo con piel de cordero”. Ante la postura del portavoz municipal, Garrido dijo que se quedaba con las disculpas del alcalde y se negaba a “entrar en nuevas descalificaciones”. Finalmente, a petición del primer edil, también presentó Puente públicamente sus disculpas, diciendo que “en ningún momento he pretendido cuestionar la profesionalidad de nadie” y que “lo lamentaba” si se había sentido ofendido.